Inician cientos de familias damnificadas de La Montaña un éxodo a los campos del norte

*La pérdida de sus cosechas los empuja a buscar trabajo en otros estados, informa Tlachinollan, y pide a las autoridades que atiendan esta emergencia

Rosalba Ramírez García

Chilpancingo

Cientos de familias de damnificados por las tormentas Manuel en la región de La Montaña, iniciaron un éxodo a los campos de cultivo de los estados del norte del país, después de perder sus cosechas de maíz, frijol, plátano y café; por lo que organizaciones de la zona exhortaron a las dependencias estatales y federales a atender la emergencia de los pueblos indígenas.
El Centro de Derechos Humanos de La Montaña Tlachinollan informó, a través de un comunicado, que cientos de familias indígenas dejaron sus poblaciones tras perder sus cultivos, que fueron parte de las afectaciones provocadas por las lluvias los días 14, 15 y 16 de septiembre.
Tlachinollan informó que el Consejo de Jornaleros Agrícolas de La Montaña (CJAM) anunció que el comedor comunitario que atiende a la población jornalera no operará, porque no está en condiciones.
Por “la carencia de abasto y la falta de atención integral a la cual se comprometió el gobernador Ángel Aguirre Rivero”, durante la instalación de la Comisión Intersecretarial para la Atención y Apoyo a Jornaleros Agrícolas Migrantes en julio de 2013.
El comedor comunitario funciona para atender específicamente a la población jornalera, antes de que los jornaleros inicien su viaje a los estados del norte, ya que este traslado puede ser hasta de 72 horas.
Son cientos de familias las que tuvieron que salir de sus comunidades, al perder sus cosechas que utilizan para autoconsumo y ventas que les representan ingresos; que al perderlos tuvieron que movilizarse al norte del país para emplearse como jornaleros agrícolas.
Tlachinollan informó que el CJAM registró entre el 27 de septiembre y el 12 de octubre de 2013 la salida de cerca de mil personas, que migraron desde La Montaña para emplearse como jornaleros agrícolas en estados como Sinaloa, Sonora, Chihuahua, Baja California y Baja California Sur, entre otros.
En el comunicado, recuerdan que el secretario de los Migrantes y Asuntos Internacionales, Netzahualcóyotl Bustamante Santín, afirmó que la Comisión Intersecretarial para la Atención y Apoyo a Jornaleros Agrícolas Migrantes sería “un mecanismo permanente de seguimiento, acompañamiento y vigilancia de las condiciones en que se desplazan los jornaleros a los campos agrícolas en el norte del país”.
Pero que en los hechos la mayoría de los planteamientos hechos por el CJAM a la comisión Intersecretarial no se han cumplido, prueba de ello es que el comedor comunitario no está en condiciones de operar, por falta de abastecimiento y apoyo económico a las personas encargadas de operarlo.
Tampoco se cumple con la presencia permanente de un médico, que atienda las necesidades de salud de los jornaleros, así como la implementación “de programas que aminoren el impacto que enfrentan miles de familias, que cada temporada se ven obligadas a salir de sus comunidades en busca de medios para subsistir”.
La Comisión Intersecretarial para la Atención y Apoyo a Jornaleros Agrícolas Migrantes está conformada por ocho secretarías: Trabajo y Previsión Social, Migrantes y Asuntos Internacionales, Asuntos Indígenas, Desarrollo Social, Salud, Educación, Desarrollo Rural, Desarrollo Urbano y Obras Públicas, el DIF Guerrero y la Coordinación Estatal del Registro Civil; y las delegaciones de Secretaría de Desarrollo Social y Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas.
Tlachinollan y CJAM exhortaron a los titulares de las dependencias que integran la Comisión Intersecretarial para la Atención y Apoyo a Jornaleros Agrícolas Migrantes, el “cumplimiento cabal” de sus compromisos y solicitudes del consejo.
Lo anterior, “sobre todo ante un escenario de emergencia como el que se vive hoy en La Montaña de Guerrero, después de las tormentas Ingrid y Manuel, cuyas afectaciones están generando un grave impacto en la estabilidad económica y alimentaria de miles de familias indígenas”.
Tlachinollan informó que se tienen contabilizadas al menos 10 mil parcelas de cultivo afectadas en 102 localidades de la región de La Montaña, “por lo que garantizar la atención integral a la población que se ve obligada a salir de sus comunidades en busca de trabajo, es una prioridad ineludible”.