Educadoras de la capital dan clases en una casa por temor a un derrumbe, pero los padres protestan

Maestras del jardín de niños Gabriela Mistral, en la colonia 1 de Marzo, se llevaron a sus alumnos a recibir clases en una casa particular, por temor al derrumbe de un cerro.
Pero este lunes, los padres de familia denunciaron que la vivienda no reúne las características de espacio, ni seguridad, ni confort para los niños, lo que afirmaron resulta más peligroso que permanecer en su escuela.
Por la mañana, las educadoras del jardín de niños decidieron abandonar las instalaciones del plantel, a pesar de que hay un dictamen de la Subsecretaría de Protección Civil, afirmó la tutora y abuela de unos de los alumnos, Petra Bello Calvo.
Comentó que también ya fue personal de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), quienes afirmaron que no hay riesgo de derrumbe del cerro que está a un costado de la escuela, y que tuvo deslaves a consecuencia de las lluvias del 14, 15 y 16 de septiembre, provocadas por la tormenta Manuel.
Pero las maestras argumentaron a los padres de familia, que existe el riesgo de que el cerro se derrumbe.
Petra Bello comentó que el derrumbe fue provocado, porque en el cerro que está cerca del kínder colocaron los tubos de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Chilpancingo (Capach).
Y que los padres de familia ofrecieron trabajar en la nivelación del cerro, para evitar que sus desprendimientos representen un riesgo para las instalaciones.
Las ocho maestras trasladaron a los menores a la calle Americas, de la colonia que lleva el mismo nombre, y están laborando en una casa que no reúne las condiciones de seguridad y confort para 75 niños de los tres grados.  (Rosalba Ramírez García / Chilpancingo).