Confirma Atliaca que está suspendido el desfogue por sus tierras del agua que inunda Tixtla

*No hay avances en el diálogo con el gobierno. El lunes pedirán a Capaseg que se habilite la planta tratadora que nunca ha funcionado

Lourdes Chávez

Chilpancingo

Sin avances concluyó la reunión de trabajo de autoridades de las comunidades de Atliaca y Acatempan, municipio de Tixtla, con el coordinador general del Ejecutivo del estado, Humberto Salgado Gómez, que volvió a escuchar las demandas de los pueblos.
El presidente del comisariado de los bienes comunales de Atliaca, Victoriano Iglesias Alarcón, indicó que se acordó otra reunión el lunes a las 10 de la mañana, para ir a la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado Sanitario del Estado de Guerrero (Capaseg) para pedir la habilitación de la planta tratadora de aguas grises y negras, porque la maquinaria nunca ha funcionado.
Los vecinos de Atliaca y Acatempan se opusieron al desfogue del agua estancada en Tixtla, por la contaminación que va esparcir en sus manantiales y tierras de labor, pero el comisario confirmó que ayer no estaban liberando el chorro de agua.
Los vecinos de Tixtla denunciaron desde el viernes que las bombas que permitirían sacar toda el agua en 20 días o en un mes, se dañaron y el único desahogo eran los resumideros naturales que limpió la misma población.
No obstante, la mesa de negociación de las autoridades de Atliaca y Acatempan con el gobierno del estado se instaló para que los vecinos de los poblados afectados por el desfogue permitieran el paso del agua por sus tierras.
Para reducir la contaminación en sus pueblos, las autoridades comunitarias insistieron en que se habilite la planta tratadora de aguas, que les den una indemnización a los trabajadores que no podrán laborar en la fábricas de tabique por el desfogue del agua, empleo temporal, construcción de bordos para ganado y construcción de brechas sacacosechas.
Consideró que aún sin el permiso de las comunidades, las autoridades van a seguir sacando el agua contaminada de la laguna negra de Tixtla, sin el consentimiento de los pueblos vecinos, “que al menos apoyen en algo”, insistió.
También afirmó que no va a recibir nada de las autoridades para afectar a sus vecinos, y la decisión de protestar, bloquear o impedir que sigan sacando el agua sucia a sus pueblos, será de la asamblea.
Denunció que el diálogo con las autoridades “avanza muy lento”, pero en este momento la gente está tranquila, porque también esperan una mesa de trabajo con el gobierno federal que sería gestionada por el senador Armando Ríos Pitter.