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Se refugian cinco familias de Las Casitas en la iglesia de El Quemado

Mariana Labastida

Cinco familias de la unidad habitacional Las Casitas, de El Quemado, se refugiaron en la iglesia de esa zona habilitada como albergue ante el temor de un deslave, debido a que con el paso de la tormenta tropical Manuel el río de La Sabana se llevó parte de los patios de sus viviendas.
En las colonias de la zona conurbada como Ciudad Renacimiento y la Emiliano Zapata subió el nivel del agua en las calles pero no rebasó la banqueta.
A las 7 de la noche habían llegado al albergue del Polideportivo CICI de Renacimiento 30 personas provenientes de diferentes colonias en busca de refugio temporal.
A las 7 de la noche del domingo, Alicia Villalba Muñoz decidió salirse de su vivienda e irse a refugiar a la iglesia, al igual que el mes pasado cuando azotó la tormenta tropical Manuel, pues en esa ocasión la crecida del río se llevó parte del terreno de atrás de su casa, por lo que el miedo de que las lluvias provocaran un deslave la hizo salirse.
La vecina está con otras 20 personas, cinco familias, en la iglesia y ahí pasó la noche vigilando el nivel del río debido a que una parte de su vivienda ya se socavó.
Al albergue les llevaron despensas por la noche, sin embargo se quejó de que luego de que no aceptaron moverse al CICI Renacimiento, como el resto de los pobladores después del paso de Manuel, los trabajadores de Sedesol no los censaron e incluso les dijeran que no son damnificados porque sus casas no fueron arrasadas por el río.
Las familias que se refugiaron en el albergue viven cerca de la orilla del río y el cauce está unos metros abajo de sus viviendas.
Alicia Villalba indicó que aunque la lluvia no es intensa se dieron cuenta de que el nivel ha subido desde la noche del domingo, y que al mediodía de ayer llegaron a visitarlos nuevamente policías municipales y también militares a quienes llevaron a ver las condiciones de las casas y les explicaron porqué se salieron.
Esperanza Muñoz Niño, quien también se encuentra en el albergue, lamentó que no se haya considerado como pérdida su huerta que tenía y de donde obtenía frutos que vendía como parte de los ingresos de su familia, así como el sembradío de maíz que arrasó el río junto con el pozo, manguera y otros materiales de trabajo.
También se habilitó el albergue de la Unidad habitacional Plácido Domingo, en La Venta, y una de las zonas que más se inundó fueron Villas Tamarindo, en esa misma zona.
La noche del domingo, según dijeron transportistas, el nivel del agua en el bulevar Vicente Guerrero incrementó, sin embargo ayer sólo en algunas zonas había encharcamientos, como en la Calle 10 y las zanjas abiertas de la obra del Acabús.
En Ciudad Renacimiento el agua corría por las calles principales y secundarias, a nivel de la banqueta, y en el Eje Vicente Guerrero, que es donde conectaba con la colonia Frontera, la corriente que va hacía el río de La Sabana era más alta, por arriba unos 15 centímetros de la banqueta, lo que, dijeron los vecinos, es normal en las lluvias.
En la orilla del río algunos colonos de Ciudad Renacimiento observaban cómo crecía el afluente y saber si se subían al segundo piso de sus viviendas o se salían, y es que con la tormenta tropical Manuel el agua alcanzó casi los dos metros de altura, por ello es que ante las alertas que hay por el huracán Raymond van continuamente a verificar la creciente.
“Así está cuando llueve y luego llueve mucho allá arriba y aquí sube más”, comentó una de las vecinas.
Del otro lado del río se observó a vecinos de la colonia Frontera haciendo lo mismo, verificando el nivel del cauce, el mismo que el mes pasado se llevó el puente peatonal que unía ambas colonias.
Por la tarde, al albergue del CICI Renacimiento llegaron a refugiarse 10 vecinos de la colonia María de la O; seis de la Sinaí; dos de El Quemado; dos de Casitas El Quemado; cinco de la Mica y el mismo número de otra comunidad de Las Chanecas.

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