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Poca afluencia en el panteón de La Sabana en el Día de Todos los Santos

Karina Contreras

En el panteón ejidal de La Sabana se vio muy poca actividad por el Día de Todos los Santos, pues muy pocas tumbas donde reposan los restos de niños fueron visitadas para ser adornadas con las tradicionales flores de cempasúchil y las veladoras.
En una visita al panteón, se pudo observar que estaba completamente limpio, pues fue retirado el monte y la basura por gente que contrató el comisario ejidal del lugar; el panteón se encuentra asentado en varias hectáreas y ya se encuentra saturado; se empiezan a hacer tumbas hasta en los pasillos.
En este Día de Muertos, donde se festeja a los niños, muy pocas personas van, pues el día grande es hoy con la llegada de los difuntos mayores y para lo cual, la mayoría de las tumbas ya estaban pintadas de blanco. Como todos los años, se vio a niños y jóvenes ofreciendo sus servicios para pintar las tumbas o acarrear agua.
Con sus cubetas caminan entre las tumbas para ofrecer el servicio a los pocos que se encontraron en el panteón y Luis, un niño de apenas ochos años,  comenta que les ha ido mal en el día, porque no hay gente que los contrate para pintar las criptas. Que por pintar una tumba con cal estaban cobrando 30 pesos y si la querían con otro color era en 40.
Que cobraban a peso cada letra que tenía la tumba, ya fuera en negra o color dorado, para resaltarla; el tambo de agua era de 10 pesos. Pero no todos olvidan a un hijo, como doña Elba que estaba limpiando la tumba de su hija Roselía, quien falleció cuando tenía un año y de eso han pasado 44 años.
Dijo que un hijo nunca se olvida, que todos los años le lleva flores y que lo seguirá haciendo hasta que cierre sus ojos. Doña Elba, con sus tres nietos, estaba retirando la tierra que le echaron a la tumba de su hija, cuando abrieron otro fosa al lado, la cual había quedado enterrada.
Otros estaban pintando las tumbas de sus familiares, pues manifestaron que no tenían dinero para pagar y, además, si ellos podían hacerlo no había necesidad de buscar a alguien más. Afuera del panteón estaban vendiendo aguas, refrescos y cervezas; así como chicharrón y palomitas. También estaban vendiendo ramos de flores de cempasúchil y terciopelo, a 10 pesos.

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