Rechaza Francia críticas por operativo policial en Toulouse; hermano de atacante está en la mira

DPA

París

El gobierno francés rechazó ayer las críticas al operativo de la policía que terminó con la muerte de Mohamed Merah, el francés de origen argelino que el lunes atacó una escuela judía en Toulouse y mató a un un profesor de religión y tres niños.
Sin duda, la crítica tiene “motivaciones políticas” y no es apropiada, dijo el ministro del Interior, Claude Guéant, al diario Le Figaro. “No hay que olvidar que hay siete víctimas, entre ellas tres niños”, agregó, al tiempo que pidió a todos los involucrados “dignidad y respeto”.
Anteriormente, el 11 y 15 de marzo, Merah había matado a tiros a tres soldados en Montauban. El jueves, el joven de 23 años murió en el marco de un operativo policial tras permanecer más de 32 horas atrincherado en una casa.
“Es inaceptable poner en duda la eficiencia de la policía”, agregó el ministro. El drama de Toulouse y Montauban es un recordatorio de la amenaza terrorista que aún se cierne sobre el país, recalcó Guéant.
El candidato socialista a la presidencia, François Hollande, señaló que hubo faltas graves en los servicios de seguridad. El atacante había estado bajo observación después de los viajes que emprendió a Afganistán y Pakistán.
“Nunca antes Francia había estado confrontada con un asesino de esta naturaleza. Por eso ha sido muy difícil para las fuerzas de seguridad predecir las acciones de este ‘lobo solitario’”, señaló por su parte el ministro, quien había supervisado la acción de la policía.
Guéant también rechazó la crítica de los expertos de que se podría haber utilizado gas en el operativo contra Merah. Al respecto, el ministro dijo que el uso de gas está prohibido según las convenciones internacionales. La polémica proviene de personas sin conocimiento de la situación, añadió.
El jefe del operativo policial, Amaury de Hautecloque, dijo que Merah quería morir como mártir. “El quería ir con Alá y sus 72 vírgenes. No ha habido otra posibilidad que matarlo”, aseguró al diario Le Figaro.
En tanto, el gobierno francés rebajó el sábado el nivel de alerta de terrorismo en el suroeste del país. Tras los asesinatos en Toulouse la región tenía el nivel más alto de alerta: “rojo escarlata”. En Francia rige el alerta “roja” desde los ataques terroristas en Londres, en julio de 2005.
Mientras, Abdelkader Merah, el hermano mayor del atacante de Toulouse, está en la mira de los investigadores franceses después de que su teléfono móvil fuera encontrado cerca de la escuela judía contra la que atentó Mohamed Merah, informó ayer el diario Le Parisien.
Los dos hermanos, de 23 y 29 años, se reunieron la noche antes del ataque contra la escuela y cenaron juntos.
Mohamed Merah había afirmado que él era el único responsable de la muerte de siete personas en total. Sin embargo, la policía investiga actualmente si Merah -según él mismo decía- tenía contactos con la red terrorista Al Qaeda. En Francia se cree que podría haber contado con personas que le prestaron su ayuda y que, por ejemplo, le brindaron las armas.
El hermano mayor del asesino, Abdelkader Merah, y su esposa, fueron trasladados ayer a París para ser interrogados. La policía cree que el mayor de los Merah, un fundamentalista islámico, podría haber adoctrinado a Mohammed Merah.
Según informó la revista Le Point, Abdelkader Merah dijo no saber nada de los planes de su hermano, pero que estaba “orgulloso” de ellos.
A su vez, el tío de Mohamed Merah, indicó que su sobrino siempre tuvo una personalidad inestable, agrega Le Point.
Ahmed A. dijo que nunca podría haberse imaginado que su sobrino pudiera ser responsable de este “barbárico” ataque y manifestó sus condolencias a las víctimas. Según dijo, la religión no tiene nada que ver con los ataques. Merah se dejó llevar él solo, afirmó. “Siempre fue inestable”.
Cuando escuchó que el asesino atacaba a norafricanos y judíos, Ahmed A. tuvo miedo. “Pensé que podría ser el siguiente”, dijo el hermano de la madre de Merah. “Jamás me habría imaginado que Mohamed era el asesino en serie”, señaló. Según contó, se enteró de la identidad del sospechoso por televisión.
En tanto, los medios franceses informaron que en la noche del viernes fue puesta en libertad la madre del atacante islámico.