Sigue el Grand Hotel sin pagar el finiquito a jubilados, denuncia Pascual Romero

Salvador Serna

En 2009 eran 13 los empleados con derecho a jubilarse del Grand Hotel and Convention Center, hoy en 2013 son más de 50 quienes exigen las banderas de huelga en esta hospedería de la zona Dorada de Acapulco para obligarla a que les liquiden su finiquito por 30 años de servicios prestados.
Los inconformes, todos ellos de la tercera edad, han visto como su líder sindical Rodolfo Escobar Ávila ha postergado el estallido de huelga en más de siete ocasiones, y en cuatro años ha ido aumentando el número de empleados con derecho a su jubilación quienes exigen su liquidación al dueño del Grand Hotel, el multimillonario empresario Alberto Saba Raffoul, quien se niega a pagarles, compartió ayer el representante patronal ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje con sede en Acapulco, el abogado Pascual Romero García.
“Pero Rodolfo Escobar prefiere postergar, postergar y postergar… a sus agremiados los hace dar vueltas, vueltas y vueltas, mientras que los jubilados haciendo corajes, corajes y más corajes porque pasan los años, y no se les paga lo que en apego a derecho les corresponde”, señaló el legista.
Alberto Saba Raffoul es uno de los principales empresarios del sector de textiles e inmobiliarios del México. Su tío, Isaac Saba Raffoul, fallecido en 2008, fue uno de los pocos empresarios mexicanos en ocupar un lugar en la lista de los multimillonarios de la revista Forbes, el sexto más rico en México en el año 2006 y también el acaudalado número 562 en el mundo, en aquel entonces.
Sobre la huelga, en octubre algunos jubilados y obreros inmersos en el conflicto laboral revelaron que los abogados del ex accionista de TV Azteca les argumentan que el corporativo hotelero no tiene dinero para pagarles, “sólo nos ofrecen el 30 por ciento de la liquidación, lo cual no es justo; por 30 años hemos trabajado al cien por ciento”, dijo uno de los jubilados en aquella ocasión.
“Creo que al escrito de la demanda laboral del Grand Hotel ya le salieron hasta telarañas, solamente lo sacan cuando hay audiencia y luego lo vuelven a guardar. Además el contrato colectivo de trabajo del Grand Hotel lleva siete años sin revisión por eso no ha habido aumentos salariales”, explicó ayer el también vicepresidente de la Canacintra Acapulco, Pascual Romero García.
Para el legista de la parte patronal, los abogados del sindicato de la Sección 12 de la CTM, deberían “hablarles con sinceridad a sus jubilados y sus obreros casi retirados sobre la postura de la empresa, porque son muchos años de no quererles pagar y se siguen acumulando el número de obreros que, justamente y conforme a la Ley Federal del Trabajo, piden se les liquide, pero el señor Saba Raffoul pues no les hace caso y los ignora por completo, el señor Saba es uno de los hombres más poderosos del continente y no lo digo yo, lo dicen las Bolsas de Valores de Nueva York, Tokio y de México, tiene dinero metido en todos lados”.
La cantidad total por la suma de todas las liquidaciones para la clase obrera no fue dada a conocer.
En su momento, los obreros informaron que se pretende negociar un finiquito del 30 por ciento, lo que les parece injusto, debido a que la hospedería es una de las más rentables en el puerto de Acapulco.
“Los abogados privados del Grand Hotel solo vienen a realizar una puesta en escena cuando son las audiencias, una puesta en escena consentida y tolerada por los abogados de la Sección 12 de la CTM. En mi opinión, en mi calidad de empresario, la huelga del Grand Hotel nunca va a estallar, es solo una anécdota más”, sentenció Romero García.