Dejan en Universidad un auto con un cadáver; un muerto en la Bocamar

Redacción

Dos ejecutados, uno en la colonia Bocamar y otro en la avenida Universidad, a una cuadra de la Costera, así como tres hombres heridos de gravedad en dos ataques a balazos en la unidad habitacional El Coloso y en el fraccionamiento Marroquín, fue el saldo de la violencia de este domingo.
El sábado, además del asesinato de un hombre vestido de payaso en el fraccionamiento Hornos Insurgentes , también se registraron otros tres ejecutados, dos de ellos a balazos. Los cadáveres fueron encontrados cerca del poblado de La Sabana, en La Laja y en el poblado de Plan de los Amates, dentro de un pozo artesiano.
Este domingo, a las 8 de la noche, efectivos policiacos y militares llegaron a la capilla Sacrosanta, que se encuentra ubicada entre avenida Universidad y la calle Ignacio de la Llave, a una cuadra de la Costera, debido al reporte de que había un automóvil focus abandonado.
De inmediato, militares tendieron un cerco alrededor del automóvil compacto pues, según civiles, dentro de la cajuela había uno o varios cuerpos mutilados.
Después de deliberar por algunos minutos, los agentes federales decidieron llamar a una grúa para remolcar el automóvil hacia las instalaciones del Semefo en la colonia Progreso, con el objetivo de iniciar la diligencia de abrir la cajuela y verificar si había hombres muertos.
Al final, de acuerdo con reportes del Ministerio Público de La Garita, se supo que dentro del vehículo estaba el cuerpo de un hombre.
A decir del personal de la capilla, la mayoría de los feligreses no se dieron cuenta del suceso debido a que la homilía terminó a las 8 de la noche, y en 15 minutos ya se había cerrado la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe, por lo que el acontecimiento pasó desapercibido.
Desde el pasado 5 de marzo la vigilancia de la Costera está cargo de la Policía Federal, como parte de las estrategias de la Operación Guerrero Seguro.
Asimismo, a las 7 de la mañana, un hombre que fue identificado como Omar Aguilar Castro, de 22 años de edad, fue atacado a balazos sobre la avenida Almendros, de la Unidad Habitacional El Coloso, presuntamente por varios pistoleros quienes habrían llegado en un auto compacto para dispararle ráfagas de rifle, al parecer AK-47, de los llamados Cuernos de chivo.
La víctima fue trasladada a un hospital para su atención médica. No se reportaron detenidos.
Apenas la semana pasada hubo un ataque en la unidad habitacional El Coloso contra tres jóvenes, de los cuales uno murió posteriormente.
Unas tres horas después se registró una balacera en la colonia Bocamar, a la que acudieron agentes de la Policía Federal quienes encontraron el cuerpo de un hombre, tirado sobre el arroyo de la calle Uruguay.
La víctima, que no fue identificada, fue asesinada de varios disparos de un arma automática calibre 9 milímetros, de acuerdo con los casquillos encontrados en el lugar.
El traslado del cadáver estuvo a cargo del Servicio Médico Forense (Semefo), mientras que un agente del Ministerio Público del Fuero Común dio cuenta de las diligencias de ley. En este caso tampoco hubo detenidos. La colonia Bocamar también ha sido escenario los últimos días de hechos violentos.
Pocos minutos después, a las 11 de la mañana, dos hombres fueron acribillados a balazos en el fraccionamiento Marroquín y quedaron gravemente heridos, de acuerdo con fuentes ministeriales.
Como en los dos hechos anteriores, al lugar llegaron agentes de las policías federal, estatal y municipal, quienes acordonaron la zona del conflicto. No se reportaron detenidos y se desconoce hasta el momento la identidad de los heridos.

Otros nueve detenidos de la Barredora

Otros nueve presuntos integrantes de la banda delictiva La Barredora o El Comando del Diablo fueron aprehendidos el sábado pasado en La Cima, por los delitos contra la salud, secuestros, extorsiones y homicidios.
Entre los detenidos, según un comunicado de prensa de la Operación Guerrero Seguro, están dos jefes de células de sicarios y presuntos autores de diferentes delitos.
A quienes identifican como jefes de las células criminales son Manuel Santos Gómez, El Gohan, de 35 años de edad, quien se encargaba del cobro de piso, extorsiones, levantones y homicidios. Era el nuevo jefe de la banda tras la captura de Juan Carlos Hernández, El More.
Aunque en las gráficas del comunicado también se pone a otro presunto jefe de la célula, Ángel Gustavo Ramírez, de 34 años, vecino de La Venta.
Otro de los que también asumió el mando es Román Vélez, El Coya, de 22 años de edad, quien también se encargaba de coordinar los levantones y homicidios
Los que fungían como escoltas de Manuel Santos son Joan Apolinar Carbajal Vélez, El Baleado, de 20 años de edad, quien también era sicario y halcón, y José Juan Galindo Villalba, de 21 años, El Juanito. Ambos recibían una paga semanal de 2 mil pesos.
También fueron arrestados Ingrid Itzel Villa Crispín, de 18 años de edad, que pagaba la nómina de los integrantes de la banda delictiva y también cuidaba a las víctimas de los secuestros, por los que recibía un pago de 2 mil pesos semanales.
La Policía Federal aseguró dos vehículos, uno de ellos una Urvan, dos armas largas, 60 cartuchos útiles, 18 teléfonos celulares, 120 bolsas con marihuana.
Apenas el 19 de marzo hubo otro comunicado de prensa donde se informó de la detención de otros seis integrantes de la banda, tres de ellos menores de edad.