Tienen dos semanas sin agua los vecinos de la calle Aquiles Serdán, del centro

Argenis Salmerón

Vecinos de la calle Aquiles Serdán, en la zona del centro, se quejaron porque desde hace dos semanas no cuentan con el servicio de agua potable y los trabajadores de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Acapulco (CAPAMA) no resuelven nada.
Durante un recorrido por la calle y las vecindades aledañas, se observó a más de una docena de personas acarreando cubetas de agua y garrafones que extraían de un manantial cercano, mientras que en los negocios se suministraban con pipas de agua.
Ahí el señor Felipe Vargas dijo que compra dos pipas por semana para su negocio, con un costo de 400 pesos cada una por la falta de agua potable, en la tubería. “No se vale que estemos pagando un servicio que es deficiente”.
Agregó que desde hace dos semanas no hay agua potable en la calle Aquiles Serdán, “Nosotros en esta zona siempre teníamos agua, pero después de la contingencia el servicio empezó a fallar constantemente”.
Al mostrar su llave doméstica, de donde no sale nada, el vecino Juan Manuel Martínez manifestó que los recibos de la CAPAMA llegan puntuales al mes, pero “el agua jamás sale, lo que sale es puro aire”.
“Otra situación es que se están robando los medidores de agua. que cuestan de 800 a mil pesos, aunado a los recibos elevados de CAPAMA y es algo que la mayoría de los vecinos no podemos cubrir y menos sin tener el servicio”, puntualizó.
La señora Reyes Diego Ríos, quien paga su recibo anualmente, mencionó que desde  principios de noviembre no tienen agua potable en la vecindad de la calle Aquiles Serdán: “sólo nos llega de a chorro y tenemos que andar con las cubetas acarreando, cosa que antes no hacíamos, pero por el mal trabajo de la CAPAMA estamos sufriendo las consecuencias”.
“Aquí los vecinos vamos a un pozo para suministrarnos, o compramos garrafones y hasta pipas con tal de tener agua para los quehaceres domésticos”, acotó.
En un boletín de prensa el viernes pasado, el gobierno del estado certificó ante el notario público múmero 13 del Distrito Notarial de Tabares, el abasto de agua en las principales fuentes de abastecimiento, la cual es entregada en bloque a la CAPAMA para su distribución entre las colonias, instituciones y establecimientos comerciales y turísticos del puerto.