En México un puñado de personas en radio y TV deciden qué hay que saber: Virgilio Caballero

*La libertad de expresión y el derecho a saber son cosa que no existen en los medios de comunicación en los hechos, advierte el periodista y productor televisivo

Óscar Ricardo Muñoz Cano

“En todo el país, en cuanto a la radio y la televisión un puñado de personas deciden lo que hay que saber; en la radio 12 personas te dicen qué escuchar y en la televisión dos personas deciden sobre una población de 120 millones de habitantes lo que se debe ver; 14 personas deciden en México qué comer, qué vestir, a dónde comer, todo lo que hay que hacer porque, con el derrumbe de la educación, la televisión sobre todo, se ha convertido en la “madrastra” de la sociedad que ha formado ya a tres generaciones”.
Así declaró ayer Virgilio Caballero Pedraza, periodista y productor televisivo, especialista de muchos años en temas relacionados con la radio y televisión y creador de medios públicos en Quintana Roo, Sonora y Oaxaca, antes de la inauguración de los trabajos con motivo de los 33 años de existencia de Radio y Televisión de Guerrero (RTG) en la sala Héctor Dávalos de la Universidad Americana de Acapulco.
Explicó que la libertad de expresión y el derecho a saber son cosa que no existen en los medios de comunicación en los hechos; “la libertad de expresión está restringida por la búsqueda empresarial de la ganancia en el periodismo que conocemos en los medios; lo fundamental es hacer dinero, mucho dinero por lo que la libertad de expresión está condicionada por la codicia empresarial”.
Mientras tanto, “el derecho a saber, ha sido reducido en México a la conclusión de un trámite largo y difícil que no se ha traducido en el derecho de la sociedad a saber lo que realmente ocurre en el país”, agregó.
Tras los recientes cambios a la Constitución Mexicana y a la ley de comunicaciones, más los que se están realizando en estos momentos con las leyes secundarias, Caballero Pedraza declaró que a pesar de que el gobierno federal se empeña en ponderar que las reformas ofrecerán oportunidades y ventajas a quienes deseen entrar a invertir, que no es verdad; “no están dando esa oportunidad, en realidad es una posible oportunidad para que otras empresas participen del manejo de la televisión en el país”.
La reforma habla de al menos dos cadenas de televisión, agregó, “pero desde luego serán los que ya sabemos: (Carlos) Slim y (Olegario) Vázquez Raña que en realidad no garantizan de ninguna manera que las personas, el público, las audiencias vayan a tener la oportunidad de estar frente a otros contenidos”.
Y apuntó, “los contenidos de la televisión no van a cambiar, no por la vía de dos nuevas empresa de cadena nacional”.
No obstante, indicó que la reforma tiene “por el lado positivo que ya no va a haber concesiones y permisos sino sólo concesiones y como concesiones se enumeran las mercantiles, las de servicio público o de Estado, las comunitarias, las indígenas y las sociales”.
Estas tres últimas, destacó, representan una buena oportunidad para provechar por parte de la sociedad para que ya autorizadas por la ley desarrollen sus propios medios y hacerse escuchar.
Quien actualmente colabora como productor con la Universidad Autónoma de México (UNAM), y desarrolla la creación de un nuevo canal de televisión en la ciudad de México, a manera de recomendación, sugirió que “las leyes secundarias que están siendo discutidas, y que tienen que darle contenido a la reforma constitucional que se hizo, atiendan el derecho de la sociedad a dos cosas fundamentales: a la libertad de expresión y al derecho a saber”.