Recibe una familia de Chilapa el cadáver de un extraño en lugar del de un hijo muerto en California, EU

*Por la negligencia del Consulado y de las autoridades que intervinieron en el traslado, el cuerpo de Ponciano Sandoval Ahuejote lleva 40 días sin llegar a la comunidad de Amate Amarillo

Luis Nava

Chilapa

La familia Sandoval Ahuejote, de la comunidad Amate Amarillo en este municipio sepultó un cuerpo equivocado en lugar del de su hijo, que llevaba 13 años trabajando de obrero en Estados Unidos donde murió por un paro cardiaco.
Por la negligencia del Consulado y de las autoridades que intervinieron en el traslado del cuerpo, la familia en este pueblo lleva 40 días sin ver el cuerpo de su hijo.
Ponciano Sandoval Ahuejote de 34 años, murió el pasado primero de noviembre en Sylmar, California, donde trabajaba de albañil, a causa de un paro cardiorespiratorio. Su padre y su esposa también radicados en ese lugar se encargaron de los trámites para traerlo a México.
Por los trámites de defunción y deportación, fue hasta mediados de noviembre que el cuerpo de Ponciano llegó al Amate Amarillo, donde su madre y demás familiares compraron el ataúd, flores, velas, lo velaron y lo sepultaron, además de darles de comer a los asistentes.
Incluso, el comisario de Amate Amarillo, Bernardo González León, intentó cobrarle a la familia 5 mil pesos por haber enterrado a Ponciano en el panteón local, argumentando que llevaba 13 años fuera del pueblo y que no había pagado las cooperaciones comunitarias.
La caja en la que había llegado el supuesto cuerpo de Ponciano no estaba sellada y fue abierta con facilidad por la madre que no se percató de que era otro cuerpo debido a que ya llevaba días de muerto y a que tenía 13 años sin ver a su hijo.
El 22 de noviembre el papá de Ponciano, Celso Sandoval, se comunicó con su esposa, María de Jesús Ahuejote, en el Amate Amarillo, para decirle que en Estados Unidos una familia le estaba reclamando el cuerpo que habían mandado a México y que ya había sido sepultado.
Al comprobar que el cuerpo que había embalsamado, preparado y mandado la funeraria Angeleno Valley de Santa Ana, California, y que el cónsul de documentación, Maritza Alonso Reyes, había autorizado trasladar a México, no era el de Ponciano, se procedió a la exhumación.
De los gastos del traslado se encargó la Secretaría de los Migrantes y Asuntos Internacionales del gobierno del estado, por medio de Karla Paola Estrada Navam encargada del Departamento de Protección. Deslindándose la misma Secretaría inmediatamente del asunto, justificando que ese ya era asunto entre las familias que reclamaban sus respectivos cuerpos.
Por pedido de la funeraria de California, la exhumación del cuerpo en el Amate Amarillo la realizó la Funeraria Chilpancingo, el pasado miércoles 4 de diciembre, sin embargo el cuerpo que ya había sido sacado fue de nuevo semi enterrado y tapado con tablas debido a que la funeraria de California aún no había depositado el pago del trabajo y del traslado en avión del cuerpo. Fue hasta el siguiente día cuando el cuerpo fue desenterrado y enviado a Estados Unidos, cuando se cubrieron los gastos.
A 40 días de que falleció Ponciano Sandoval, sus familiares no han podido darle cristiana sepultura a su cuerpo. Su madre María de Jesús Ahuejote y familiares en el Amate Amarillo esperan que el verdadero cuerpo llegue hoy miércoles 11 de diciembre.
De nuevo, lo velaran y harán el gasto que implica todo el ritual para sepultar a una persona en esa pequeña comunidad, por lo que están solicitando al gobierno del estado y al municipal ayuda con los gastos ya realizados y que les faltan por realizar por esta negligencia.