Protestan daminificados del refugio en el Indeg ante la amenaza de ser desalojados hoy

*En el albergue se encuentra un número considerable de personas con discapacidades, así como madres solteras y más de 60 niños de familias de escasos recursos

Familias damnificadas de la capital del estado protestaron ante la amenaza de funcionarios del Ayuntamiento, encabezado por Mario Moreno Arcos, de ser desalojados del albergue ubicado en las instalaciones del Instituto del Deporte del Estado de Guerrero (Indeg).
Por temor a más represión, los damnificados que cumplirán ya tres meses en dicho albergue, decidieron no dar sus nombre, y denunciar que por instrucciones del alcalde Moreno Arcos, 200 familias damnificadas por la tormenta tropical Manuel deberán abandonar dicho lugar, “para refugiarse donde puedan”.
En el albergue se encuentra un número considerable de personas con discapacidades, así como madres solteras y más de 60 niños de familias de escasos recursos.
Una de las damnificadas, quien sólo dijo que se llama Rosa, explicó que la información se dio a conocer desde el miércoles por la noche, como un rumor; pero por la mañana de este jueves, las familias que permanecen en las instalaciones del Indeg decidieron alzar la voz, para prevenir el desalojo que está siendo coordinado por el gobierno municipal.
Las familias que se refugian en el albergue son de escasos recursos y de colonias que estaban ubicadas en zonas de alto riesgo, quienes perdieron en su totalidad la propiedad donde vivan, y ahora sólo están a la espera de que se les brinde un terreno para reiniciar su vida.
Los afectados mostraron algunas pancartas, donde exigieron al alcalde Mario Moreno que cumpliera con su palabra de no dejarlos desamparados. También le reclamaron el que intente sacarlos, cuando aún no tienen dónde vivir.
Los damnificados denunciaron que la noche del miércoles, la encargada del albergue y secretaria de Desarrollo Social del municipio, Denisse Martínez Mendiola, llegó acompañada de otros funcionarios y algunos policías municipales, para anunciarles que sólo podrían permanecer en el albergue hasta las 12 del día de este viernes, debido a que el inmueble sería entregado al gobierno estatal.
Ante la molestia y negativa de los damnificados, la funcionaria les advirtió que “no le importaba a donde se fueran, aunque sea debajo de un puente, pero se tenían que ir”.
Con lágrimas y voz cortada, una de las afectadas señaló que en el albergue hay más de 200 familias, que perdieron sus bienes por completo y que hoy, no tienen siquiera dónde dormir.
Pese a ello, el gobierno municipal los está dejando desamparados y exigiéndoles que abandonen el albergue, pues de lo contrario, para este viernes a las 12 del día enviarían a policías para realizar el desalojo.
Explicaron que les dijeron que este jueves ya no habría comida para ellos, sin embargo, ante la presencia de diversos reporteros, casi al mediodía se les ofreció un platillo por persona.
También les informaron que a las personas que salieran a trabajar temprano este viernes, ya no se les daría acceso a las instalaciones a su regreso, mientras que las personas que quedaran dentro serían desalojadas a la hora mencionada.
Cabe recordar que hace una semana el alcalde Mario Moreno adelantó que se cerraría definitivamente el albergue del Indeg, pese a ser el único que quedaba en Chilpancingo; sin embargo, frente a representantes de medios de comunicación, el primer edil afirmó que se abriría otro albergue, aunque más pequeño.
Al parecer esta promesa no será cumplida, por lo que los damnificados exigieron la presencia del alcalde y “que él mismo tenga el valor de decirnos que nos tenemos que ir”.
Otra de las inconformes recordó que una de las promesas del presidente de la República y del gobernador del estado, es que las familias estarían albergadas hasta que tuvieran un techo donde vivir; incluso, Moreno Arcos también anunció la adquisición de un terreno en el que temporalmente construiría unas galeras para darles un techo a las familias.
Lamentó que hoy el gobierno municipal esté violando esta promesa, y más aún, que lo haga de una forma tan dañina para los damnificados. (Anarsis Pacheco Pólito / Chilpancingo)