Amarra y amordaza una maestra de Ciudad Altamirano a siete niños de sexto grado con cinta canela

Israel Flores

Ciudad Altamirano

Madres de familia fueron a protestar a la primaria Adolfo López Mateos, en la colonia Tierra Blanca de Altamirano, porque una maestra el pasado miércoles castigó a siete niños de sexto grado amarrándolos de las manos con cinta canela; y a dos de ellos, los amordazó. Lo que fue considerado por las madres como un acto propio de la delincuencia organizada.
Cerca de las 10 de la mañana, arribaron las madres de los siete alumnos afectados de sexto grado, y aseguraron que por segundo día consecutivo han visitado al director, para hablarle del tema, pero les da largas.
Acusan a la maestra de sexto año Deysy Leyvy Salinas Mojica, de ser la responsable de la agresión a los menores el pasado miércoles. Incluso señalan que usó palabras altisonantes.
El director, quien se identificó con el nombre de Demetrio, dijo que para el próximo martes hay una reunión con la supervisión escolar 175, con la cual se espera resolver la inconformidad de las madres.
Confirmó que ya hay un documento donde le llaman la atención a la maestra. Dijo que le tocó ser testigo de ver a los niños con cinta canela en las manos. La cinta estaba sujetada a tal forma que la tuvieron que contar con la punta de una pluma.
Al buscar a la maestra, aceptó dar su versión y expresó que los niños estaban aventándole piedras a los de segundo grado, que son niños más chicos, y que optó por castigar a los responsables, “sólo les di una vuelta en las manos”, expresó la maestra, y luego dijo que “a dos que dijeron groserías, también les puse en la boca, pero no es para tanto”.
Las madres de familia que se encontraban cerca, al escuchar la versión comenzaron a gritar: “Pareces sicaria, eso sólo lo hace una secuestradora; esos métodos sólo los usan los que andan en cosas malas”.
La principal inconformidad de las madres es por el uso de la cinta canela en los menores, lo que consideran una herramienta propia de la delincuencia organizada para sujetar y levantar a sus víctimas, que luego aparecen ejecutados con cinta canela en las manos y boca.
El caso aún no se resuelve, y se espera que el martes sea la reunión para atender el tema y conocer la medida correspondiente.