Muchos turistas, basura en el mar y venta de moluscos en veda, ayer en la playa Angosta

Argenis Salmerón

Muchos turistas, basura en el mar y ningún control en la venta de moluscos bivalvos fue el panorama de la playa Angosta en el séptimo día del periodo vacacional de fin de año.
Durante un recorrido por la franja de arena se observó que los prestadores de servicios turísticos colocan sombrillas y toldos deteriorados, los cuales ofrecen a los turistas a 50 pesos sin límite de tiempo.
Pero las playas se encuentran sucias, con hojas y plásticos flotando, aunado a que los alrededores se encuentran descuidados por la Promotora de de Playas y la Dirección de Saneamiento Básico.
Además, en el área de playa no hay control en la venta de moluscos bivalvos para los turistas, sin tomar en cuenta la veda en dos especies de ostiones.
La venta de los ostiones está a la vista de todos los que visitan la playa, porque los muestran en unas mesas de plástico al final de la franja de arena.
El pasado 19 de diciembre, integrantes del Comité Estatal Interinstitucional de Sanidad de Moluscos Bivalvos prohibieron la captura, extracción y comercialización de dos especies de ostiones porque se detectaron niveles altos de una alga tóxica en Acapulco.
Mientras que los turistas llegan a la playa con hieleras repletas de comida y bebidas y se instalaban en las sombrillas para disfrutar de un gran momento en el mar.
Ahí, los visitantes observaban la basura en el mar y dudaban en meterse y algunos sólo sumergían los pies en el agua.
La mayoría de los visitantes preferían estar bajo la sombra de una sombrilla o un toldo tomando una campechana -para curarse la cruda de anoche- disfrutando el paisaje de la playa, mientras que la brisa del mar susurraba en sus oídos y eran atrapados por un sueño temporal.
Los niños preferían buscar conchas o piedras en la orilla del mar, las cuales eran arrojadas con el rompimiento de las olas.
El restaurantero Jesús Alonso Mendoza dijo que la venta ha sido “floja” durante la temporada de vacaciones: “los turistas no quieren consumir lo que nosotros ofrecemos y sólo rentan las sombrillas y toldos”.