Sorprendió a turistas y residentes el espectáculo de pirotecnia en la bahía

*Llenan visitantes la zona de la Condesa hasta la Vía Rápida para observar los cien mil cohetones que fueron detonados los primeros minutos de 2014

Carlos Moreno A.

Un estruendoso espectáculo de pirotecnia en la bahía de Santa Lucía dio la bienvenida al Año Nuevo y a los turistas y residentes de Acapulco, en el que 100 mil cohetones dejaron sonrisas, buen humor y sorpresas a quienes los presenciaron en la Costera y playas del puerto.
Los restaurantes y hoteles ubicados en la franja Costera se llenaron de turistas y acapulqueños para observar los fuegos artificiales y brindar por los buenos deseos en este nuevo año.
Desde la playa Hornos hasta la Papagayo las banquetas y playas estuvieron abarrotadas de personas que en algunos casos hasta dispusieron sillas, mesas, bebidas, alimentos para cenar y así celebrar la llegada del Año Nuevo.
Desde las 10 de la noche, comenzó la circulación lenta por la avenida Costera, mientras los turistas y residentes compraban en las tiendas provisiones de última hora.
Un ejemplo fue el de una pareja de novios del Distrito Federal que estaban en la playa y  con miras a casarse en este puerto en 2014, quienes contaron que pasar el fin de año en Acapulco “es lo máximo y por eso pensamos casarnos aquí”.
En playas y en banquetas se observaron turistas y residentes con perros que corrían y jugaban en la arena, mientras sus dueños comían en espera del espectáculo.
Casi al llegar la medianoche del martes se anunció a los visitantes el “4,3,2,1, Año Nuevo” y se empezaron a disparar los 100 mil cohetones en la bahía de Santa Lucía.
Entre gritos y risas, los espectadores de los fuegos artificiales comenzaron a darse el abrazo y desearse lo mejor.
Junto con la pirotecnia comenzaron a elevarse los globos de cantoya que inundaron el cielo del puerto con los buenos deseos.
Después del espectáculo los visitantes comenzaron a retirarse a sus hogares y disfrutar de la llegada del año, lo que generó un intenso congestionamiento vial, principalmente en la Costera y avenidas aledañas.
En la Costera en el punto de La Condesa hasta 40 minutos se hicieron los conductores para llegar a La Diana; otro punto fue en la Vía Rápida, a pesar de que había agentes viales que intentaron agilizar la circulación.
Por la avenida Wilfrido Massieu también hubo congestionamiento vial y en la Costera Vieja.
Durante el espectáculo de Fin de Año, en la avenida Costera y en las playas Hornos, Tamarindos, Golfito, Asta Bandera y en la Vía Rápida se observó a trabajadores de Protección Civil municipal y ambulancias, así como del estado, soldados, marinos y policías federales y municipales.
Una de las historias románticas que hubo en este puerto en Año Nuevo fue el de una pareja de turistas del Distrito Federal, Mario y Patricia Mora, que se casaron en el puerto hace 35 años.
Estos visitantes observaron el espectáculo de pirotecnia en la franja de arena, por la Vía Rápida.
Consultados después del espectáculo, Mario y Patricia, de 58 y 55 años, contaron que hace 35 años se casaron en un hotel de la Costera y que decidieron venir este año al puerto como “una luna de miel”.
Expresaron que sentirse contentos de pasar el año nuevo juntos porque “teníamos unos tres años que nos la pasábamos en casa con la familia, pero no solo nosotros”, indicó Mario, quien es contador jubilado.
Los turistas indicaron que tienen tres hijos grandes, que dos de ellos viven el Distrito Federal y otro en Guadalajara, y que en la cena de Navidad se juntaron pero que en la fiesta de Año Nuevo decidieron que cada quien celebraría como quisiera.
Según Patricia, que es trabajadora del IMSS, decidieron venirse a divertir y pasarla en las playas del puerto y recibir el Año Nuevo juntos, ya que en febrero cumplirán 35 años de casados.
Contaron que desde hacía unos cinco años no venían al puerto por cuestiones de trabajo y familiares, pero que este año tomaron la decisión de venir.
Ambos turistas que estaban parados en el mirador de Vía Rápida, lanzaron globos de cantoya que les dieron en el hotel donde se hospedan pero no quisieron precisar cuál.