Mala calidad y ninguna vigilancia en venta de juguetes en Chilpancingo, acusan padres

Jacob Morales Antonio

Chilpancingo

Compradores se quejaron por los elevados costos, mala calidad y la falta de garantía de los juguetes que venden comerciantes semifijos en Chilpancingo, mientras la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y la Dirección de Gobernación Municipal, ausentes en el Día de los Reyes Magos.
En un recorrido por las calles aledañas al Zócalo y el mercado central de la ciudad, padres de familias que conseguían los mejores juguetes y precios, se inconformaron por los altos costos.
Los entrevistados indicaron que recurren a esos establecimientos por carecer de mayores recursos económicos, sin embargo se han encontrado con precios elevados, por lo han tenido que hacer un esfuerzo en la compra de los productos, o en algunos casos recurrir a mercancías de baja calidad y dudosa procedencia.
Por su parte, el Ayuntamiento de Chilpancingo informó que se dieron 30 permisos para ambulantes semifijos y cuatro a establecimientos para expender sus productos en las calles del centro de la ciudad, sin embargo, en el recorrido se observaron decenas de puestos semifijos.
Consultado vía telefónica, el director de Gobernación municipal, Inocente Mojica Peña, aseguró que no se otorgó ningún permiso para cerrar vialidades; esto, al preguntarle del cierre total de la calle República del Salvador y parcial en avenida Miguel Alemán.
Durante el recorrido no se vio ningún funcionario de la dirección de Gobernación ni de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), para recoger las denuncias de abusos de los vendedores, garantizar los derechos de los clientes y resguardar el libre tránsito.
La señora Elena Martínez indicó que en este año los Reyes Magos tendrán que recurrir a productos “chinos”, porque “la economía no está bien” y los precios de los productos que piden los niños están “altísimos”.
Entrevistada en los alrededores del mercado central, expresó que en la actualidad las cartas a los Reyes incluyen productos tecnológicos, en su mayoría celulares, computadoras y juegos electrónicos “costosos”, lo que es imposible adquirir para la gente humilde.
Por su parte, el señor Ricardo Carbajal expresó que este año los Reyes realizaron un esfuerzo en la adquisición de los juguetes que pidieron sus dos hijos, porque a pesar de que la economía “no está como uno quiere, no se puede destruir esa ilusión de los niños”.
En el recorrido, se pudo observar que la mayoría de los juguetes eran de procedencia China, y aunque los vendedores garantizaban el producto en los altavoces, cuando se les preguntó dónde se les localizaba si el producto resultaba irregular, contestaron que por eso se probaba antes de que se lo llevaran los clientes.