El Ayuntamiento es el primero en violar la ley, responde el presidente del Colegio de Ingenieros Civiles

*El secretario de Desarrollo Urbano de Acapulco, Manuel Malváez Rosillo, advirtió que los directores residentes de obra serían suspendidos si incumplían con lo que anuncian para obtener las licencias y permisos de construcción

Karla Galarce Sosa

El presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Guerrero, José Ángel Nucico Casarrubias, consideró que la advertencia de lanzó el secretario de Desarrollo Urbano de Acapulco, Manuel Malváez Rosillo, en el sentido de que los directores residentes de obra serían suspendidos si incumplían con lo que anuncian en sus obras para obtener las licencias y permisos de construcción, sólo promueve un desarrollo anárquico, debido a que señaló, “la ley no se aplica para todos por igual” y sólo se suspenden “algunos” proyectos.
En declaraciones telefónicas, Nucico Casarrubias dijo que son escasas las obras que cumplen con la integración de una bitácora de obra, o con un informe de actividades, incluso, señaló que las obras que emprende el mismo Ayuntamiento, incumplen con lo que establecen los reglamentos y leyes de desarrollo de obras públicas o privadas.
Sobre la advertencia que hizo Malváez Rosillo de que con la suspensión se acabaría “de raíz” con el problema, el ingeniero opinó que la medida de suspender a los directores residentes de obra puede ayudar, pero la suspensión no es toda la solución, sino que se tiene que atender desde que el proyecto llega  a la Secretaría porque debe ser revisado para que cumpla con los planes y programas.
Ahondó que el proyecto debe ser revisado en el tiempo que marca el reglamento, sin embargo ese es un primer aspecto que el Ayuntamiento no cumple.
“De acuerdo con el reglamento, el municipio debe dar, en un lapso de 40 días para expedir la licencia, pero la autoridad incumple, así es que cuando el proyecto presenta su propuesta, por el retraso de las autoridades o por pérdidas que genera ese retraso, el constructor decide comenzar”, dijo Nucico Casarrubias.
Lo anterior, continuó, da pie a que el constructor desista de desarrollar los proyectos o, en comenzar las obras sin contar con los permisos.
Opinó que los supervisores de obra deben acatar la labor de supervisión, y opinó que no son proactivos sino que se dedican a suspender algunas obras, “siendo que todas las obras violan la normatividad”.
“El supervisor de obra debe supervisar cada semana, pero no se hace, si se hiciera de esa manera, no habría problema y todo marcharía en orden, con una bitácora puntual, con los registros del propietario y el director residente de obra, porque en muchos casos no las tienen en obra o, simplemente no las tienen”, expuso.
En toda obra, pública o privada, dijo, debe haber una bitácora con los aspectos relevantes de la obra, la autoridad en ninguno de los casos da seguimiento, incluso las que ejecuta el municipio, ya no digamos las de los ciudadanos comunes y corrientes, también las obras del municipio carecen de directores residentes de obra, debe tenerlo de acuerdo a la ley y, el municipio no cumple la ley, siendo que está obligado en ese aspecto.
Pidió que se aplique la ley por igual a todos, y comentó que “no puede ser aplicada a unos cuantos, a medias porque si no se hace de esa manera, hay consecuencias como las que se tienen ahora”.
Dijo que aunque Acapulco cuente con un buen Plan de Desarrollo Municipal, si no hay aplicación de la ley, de nada sirve tenerlo.
“Acapulco es una de las ciudades más planeadas, pero a la que menos se da seguimiento a las obras. El plan que se está actualizando, que para este año debe estar actualizado, debe haber un estricto cumplimiento, a partir del propio Ayuntamiento, desde que el director residente de obra presenta el proyecto al Ayuntamiento, hasta que concluya la obra, tiene que cumplirse al pie de la letra y no es difícil es más difícil no cumplir porque se generan costos innecesarios que se pueden prevenir si se cumple con la ley”, expresó.
Manifestó que los integrantes del colegio que preside exigen que el gobierno cumpla a cabalidad con sus obligación, y haga valer las leyes y reglamentos en igual medida para todos. “Si ellos (el gobierno) son los autorizados para cumplirlo e incumplen, se fomenta que la ciudadanía no cumpla y eso se llama anarquía. Se propicia la anarquía, creo que aquellos directores residentes de obra que violen las leyes, que modifiquen los proyectos autorizados, sí deben ser sancionados, pero que se sancione también al gobierno mismo”, expuso.