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Temen damnificados de Tepetates, en Ayutla, que no los tomen en cuenta para la reubicación

Poco más de 60 personas, de 22 familias desplazadas de la comunidad de Tepetates por los daños provocados por la tormenta Manuel y el huracán Ingrid, siguen viviendo en el mercado municipal de Ayutla, sin que las autoridades les informen cuándo serán reubicados.
A 72 días de la contingencia, los damnificados dicen que sólo los han hecho esperar y el gobierno no ha cumplido con su promesa de construirles sus casas, y desconocen si los tomarán en cuenta pues realizaron un censo en el albergue temporal y las 22 familias que están en la cabecera municipal no están en esa lista, dijo el comisario Fermín Villanueva Cortés.
Además, algunos hombres ya se emplearon como peones en las construcciones y otros en empleos temporales y temen que por ese hecho no los tomen en cuenta para recibir el apoyo del gobierno federal y estatal, cuando entreguen las casas en el nuevo Tepetates, detalló.
Agregó que “sólo una vez en noviembre nos visitó personal de la Secretaría (de Desarrollo Social) y no nos han informado qué pasará con nosotros, ellos nos dijeron que regresáramos al campamento provisional cerca de Tepetates pero no hay lugar donde dormir, y como están a la intemperie tememos que se nos enfermen los hijos y aquí al menos tenemos atención médica para algún caso de emergencia”.
Abundó que “en diciembre nos visitó el ingeniero Santiago Méndez Robledo, representante de la Sedesol, para verificar los terrenos donde se pretende hacer el nuevo poblado y el ingeniero nos dijo que los terrenos son estables y no representan riesgos como en la comunidad de Tepetates por el posible deslizamiento de tierra y que solo resta realizar los trámites y las acciones jurídicas para que les otorguen los terrenos”.
El argumento de las autoridades para la tardanza es que deben esperar a que el gobierno de Ángel Aguirre Rivero tenga los recursos para poder pagar el predio, ubicado a 3 kilómetros de Tepetates, donde serán construidas las primeras 120 viviendas.
Rubén Herrera Cortés, otro de los refugiados en el mercado municipal, inaugurado hace tres semanas por el alcalde Severo Castro Godínez y autoridades del gobierno del estado, dijo que esperan “que no nos abandonen porque en verdad sí necesitamos donde vivir, pues cuando se terminen de otorgar los locales a los comerciantes nos tendremos que retirar, y si no tenemos un lugar, pues se nos complicará mucho salir adelante”. (De la corresponsalía / Ayutla).

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