Las autodefensas son una expresión de colaboración del pueblo contra la violencia: Garfias Merlos

*La Policía Comunitaria, la policía ciudadana, la organización de Guerrero nos habla de una realidad muy diferente a la de Michoacán”, dice al concluir la reunión de obispos en Altamirano

Israel Flores

Ciudad Altamirano

Este jueves concluyó el encuentro provincial de obispos de Guerrero en Altamirano, donde valoraron la situación de la violencia y las formas de atender a las víctimas.
El arzobispo de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, dijo que la realidad de Michoacán es diferente a la de Guerrero, de tal forma que las autodefensas son diferentes y también las formas de trabajar.
En conferencia de prensa participaron los obispos de Altamirano, Maximino Martínez Miranda; de Tlapa, Dagoberto Sosa, y Alejo Zavala Castro de Chilpancingo, además del arzobispo Garfias Merlos.
El arzobispo valoró que no se puede comparar lo que ocurre en Guerrero con lo de Michoacán, “la Policía Comunitaria, la policía ciudadana, la organización de Guerrero nos habla de una realidad muy diferente a la de Michoacán, lo importante es que se mantenga la vinculación entre esos grupos y las autoridades, porque creo que es una excelente expresión de participación ciudadana y de colaboración del pueblo para construir la paz”.
Garfias Merlos dijo que los grupos de autodefensa en Guerrero están logrando que sus pueblos expresen que se sienten más seguros, pero que se trata de un trabajo donde las autoridades mantienen vínculo y diálogo con ellos.
Y sobre lo que ocurre en el vecino estado dijo que “es un momento que está viviendo Michoacán, donde se ve que el gobierno federal está tomando las medidas correspondientes, y está dando esperanza para los michoacanos. Tenemos que aprender todos de eso”.
Dijo que en Guerrero “hemos visto una sana experiencia entre las autoridades y las policías comunitarias, y eso aporta mucho a una relación institucional”.

La delincuencia, más sofisticada en Tierra Caliente

En tanto que el obispo de Altamirano, Maximino Martínez Miranda, consideró que es muy diferente la realidad de Tierra Caliente a la de la Montaña y a la de otros puntos donde están apareciendo las autodefensas, por lo que consideró que no hay condiciones como para que surjan esos grupos en esta zona.
“Sin embargo, cuando la sociedad se cansa, se defiende de alguna forma”, advirtió el obispo de Altamirano.
Dijo que “las policías comunitarias como que aparecen en Guerrero, viven condiciones diferentes aquí, ya que aquí están muy sofisticados los grupos organizados, usan armas poderosas como cuernos de chivo, por lo que sería difícil responder con armas sencillas, sin embargo cuando ya se cansa la ciudadanía tienen que buscar otra manera de defenderse, y ojalá y no se dé esta necesidad”.
Agregó Martínez Miranda que sí hay respuesta en Tierra Caliente por parte de las autoridades, “yo veo que el hecho de que detengan a varios secuestradores, de que detengan a algunos de los jefes, esto podría reforzar la paz en la región, la participación del Ejército, de la Marina, que han estado apoyando, y esto parece que ha bajado un poquito la presencia delictiva”.
Recalcó que “no podemos decir que aquí se va a dar lo mismo que en la Montaña, porque son circunstancias diferentes, pero sí se debe de atender para que no se crezca esta situación”.
Los obispos de Guerrero realizaron su decimoquinto encuentro, en el que acordaron dar un seguimiento muy puntual desde las parroquias a las víctimas de la violencia, con atención pastoral, psicosocial y evangelizadora.
Además de que compartieron experiencias acerca de la atención de desastres como el de las inundaciones de septiembre.