No se vio ayer vigilancia militar ni policiaca en el mercado de la capital

*Locatarios han salido porque no pueden pagar las cuotas que les exige el crimen organizado, comentan

Redacción

Chilpancingo

El mercado central capitalino Baltazar R. Leyva Mancilla ya no cuenta con vigilancia a dos días del secuestro de cinco tablajeros y cuando son constantes las denuncias de extorsiones a las que son sometidos los vendedores establecidos y ambulantes.
A pesar de la visita de militares y policías estatales durante este fin de semana al mercado Baltazar R. Leyva Mancilla, no hay recorridos de manera constante, y comerciantes continúan en zozobra ante las acciones cometidas por el crimen organizado.
En un recorrido por la mañana y tarde de este lunes en el mercado central no se vio la presencia de militares, ni de policías estatales, que resguarden la seguridad de los comerciantes, que han denunciado las extorsiones.
El pasado 2 de enero se dio a conocer que el gobierno del estado, establecería nuevas estrategias de seguridad para la capital del estado, después de las constantes denuncias de empresarios integrantes de la Cámara Nacional de Comercio de la Ciudad de México (Canaco) y Confederación Patronal de la República Mexicana, (Coparmex), pero se han demostrado resultados realizados en los puntos más críticos de la capital, como el mercado.
Sin ningún tipo de efectivo policiaco presente en el mercado central capitalino ubicado al norte de la ciudad se desarrollan las actividades cotidianas, donde más de 2 mil comerciantes laboran diariamente desde las 6 de la mañana hasta las 8 de la noche.
Se dio a conocer que comerciantes del mercado han salido por temor a ser secuestrados, porque no pueden cumplir con las cuotas establecidas por el crimen organizado.
El mercado no cuenta con la vigilancia necesaria para combatir las extorsiones dentro de sus instalaciones, ni tampoco para prevenir que se repitan secuestros al interior.
Entre los comerciantes se dice que los efectivos militares “nada más entran y salen en menos de cinco minutos”, sin permanecer con rondas de vigilancia para reforzar la seguridad.
Actualmente no se previene ningún tipo de delito, ni se vigila de cerca los lugares que han sido señalados por los comerciantes, que atemorizados por la infiltración de policías en el crimen organizado, temen denunciar los hechos de los cuales han sido víctimas, como extorsiones y secuestros.
Debido al nivel alto de extorsiones que se sufre en la capital del estado, se unieron la Cámara Nacional de Comercio de Chilpancingo (Canaco) y la Confederación Patronal de la República Mexicana de Chilpancingo (Coparmex).
En lugar de prevenir más secuestros, los efectivos policiacos sólo visitan el mercado de vez en cuando, y hacen un recorrido que no dura más de una hora.
La seguridad que se destinó para resguardar “uno de los focos rojos en la capital”, no estaba presente durante la mañana de este lunes, donde se ha señalado que el crimen organizado tiene controlada la venta de los productos.
Los comerciantes tienen miedo de hablar de la realidad que viven, pues temen que se repita lo que viene en los últimos días como los secuestros de dueños de carnicerías; el silencio se apodera de los comerciantes ante las constantes amenazas del crimen organizado.