Piden ecologistas de Chichihualco que intervenga el gobernador ante la tala y el riesgo de un enfrentamiento

*Cortan árboles de zonas que surten de agua a Chilpancingo y a su cabecera municipal, advierten

Rosalba Ramírez García

Chilpancingo

Ejidatarios y ambientalistas de Chichihualco advirtieron que es necesaria la intervención del gobierno del estado para detener la tala inmoderada en la sierra de Leonardo Bravo porque podrían generarse enfrentamientos.
Los activistas por la defensa del bosque habían advertido que en 2014 los campesinos que siembran elotes de riego verán afectada su producción por la disminución de los cuerpos de agua, pues aunque en la temporada hubo lluvias intensas que arrasaron con muchos pueblos, sin árboles no hay suficiente capacidad para retener las reservas.
Los ecologistas que llamaron a la redacción de El Sur omitieron sus nombres por temor a represalias de los talamontes, además de que han recibido amenazas de las autoridades agrarias de Chichihualco porque se oponen a la devastación que permiten las autoridades.
También han denunciado que el alcalde Leopoldo Cabrera Chávez los presionó para dejar de hacer denuncias públicas, pero consideraron que no pueden seguir callados ante la omisión de las autoridades estatales y federales de medio ambiente que constataron el corte de árboles cerca de los manantiales que no estaban marcados según el plan de manejo que autorizó la Semarnat para diez años de aprovechamiento.
La deforestación es muy veloz y se terminarán el bosque antes de que concluya el permiso federal, afirmaron.
Llamaron al gobernador Ángel Aguirre Rivero a que intervenga en el problema antes de que haya enfrentamientos, porque no se está cumpliendo la indicación que oficialmente se conoce de detener el corte de árboles, porque el aserradero que compró los derechos del ejido reanudó los trabajos en octubre. Los había parado por la intervención de los ecologistas, quienes retuvieron maquinaria.
Advirtieron que no están dispuestos a seguir permitiendo la tala de árboles y responsabilizaron a las autoridades estatales de los enfrentamientos que pueda haber.
Explicaron que continúan abiertas las brechas para llevar los camiones de madera al aserradero de Lagunillas, en Amojileca, y estimaron que este conflicto también va a afectar a Chilpancingo porque están cortando árboles de la zona conocida como Las Trincheras, que se encuentran arriba del bosque de Omiltemi, de donde se abastece a la capital.
Reiteraron que siguen talando árboles de El Faisán, Agua de las Tablas y Filo Trozado, que es donde se surten de agua los manantiales que abastecen a Chichihualco.
Llamaron a la delegada de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Maricela Ruiz Massieu a que acuda a la sierra de Chichihualco y constate que la tala continúa.
Afirmó que los talamontes están protegidos por el diputado de Movimiento Ciudadano Evencio Romero Sotelo y la Confederación Nacional Campesina, organización a la que pertenecen, “él los defiende a capa y espada como si él fuera ejidatario, por eso se sienten con mucho valor”.