Serán reubicadas viviendas que están junto a la presa Cerrito Rico, anuncia Aguirre

Serán reubicadas viviendas que están junto
a la presa Cerrito Rico, anuncia Aguirre

La estructura de la represa es segura, dice Conagua, pero los vecinos afirman que tiene una grieta “muy grande”

Rosalba Ramírez García

Chilpancingo

El gobernador Ángel Aguirre Rivero informó a damnificados de la tormenta Manuel que 20 viviendas que estaban al margen de la presa Cerrito Rico serán reubicadas, pero todavía no tiene el predio ni fecha para iniciar la construcción, y anunció que expropiará los terrenos que están en las inmediaciones de la presa en caso de no llegar a acuerdos con los propietarios.
Lo anterior, ayer durante un recorrido por la presa Cerrito Rico y el río Huacapa, que fue convocado para empezar a las 11 de la mañana pero el gobernador, el subdirector general de Agua Potable, Drenaje y Saneamiento de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Oscar Hernández López, y el presidente municipal de Chilpancingo, Mario Moreno Arcos, llegaron hasta las 12:30, mientras los damnificados esperaron en el sol hora y media.
Ahí un grupo de damnificados se acercó al gobernador y le manifestó su preocupación porque el vertedero de la presa está fracturado y los trabajos están detenidos, “estamos con el Jesús en la boca, tenemos miedo de lo que pueda pasar”.
Uno de los damnificados le recordó al gobernador que en su campaña les prometió que mejoraría el encauzamiento del río Huacapa y la construcción del Chilpanbús, pero ninguna de las obras se ha realizado.
El gobernador respondió con otro tema, y les dijo que 20 viviendas que estaban a las faldas de la presa serán reubicadas y que “posiblemente” hoy concretarían la adquisición del terreno a través de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
Después afirmó que Conagua está “tratando de darle celeridad” a los trabajos pero que hay resistencia de algunos vecinos a lo largo del encauzamiento.
“Estamos en proceso de diálogo, pero si no, tenemos que aplicar la ley para demoler algunas de estas viviendas y un edificio, porque están fuera de la ley desde el momento en que se colocaron en zona federal”, dijo.
Aguirre Rivero no especificó a cuáles viviendas se refería ni se le pudo preguntar porque estaba completamente rodeado de personal de seguridad que impedía que los reporteros se acercaran.
El funcionario de Conagua les informó que en la presa se hicieron estudios de toda la base hidrológica para determinar la capacidad de las estructuras, y el resultado “fue positivo, la presa tiene la seguridad necesaria”.
Dijo que ya empezaron a trabajar en la estructura del vertedor donde están haciendo reposiciones de empedrados, pero insistió en responsabilizar de la lentitud de los trabajos “por las obstrucciones de las casas que invadieron la zona federal” y será hasta que esté liberada esa zona cuando podrán continuar.
Afirmó que hoy empezarán con el trabajo, rodeando las casas que “invadieron zona federal”.
Los damnificados entregaron al gobernador copia del dictamen que Conagua les entregó, y afirmaron que no coinciden con la dependencia, porque dice que la presa está “en buenas condiciones estructurales sin riesgo de fallas”, mientras que el vertedor tiene una grieta “muy grande”.
Los damnificados le recordaron al gobernador que el vaso de la presa está conformado por pequeñas propiedades, y pidieron la expropiación de esos terrenos para que Conagua ya no tenga pretexto para no hacerse responsable de la presa Cerrito Rico.
El gobernador respondió que ya solicitó a Mario Moreno que le entregue un dictamen y un mapa para saber cuáles son los predios, “para tratar primero de llegar a una negociación y si no por supuesto yo estaría en la disposición de emitir un decreto expropiatorio”.
También estuvo el director de la Conagua en Guerrero, Humberto Gastélum Espinoza, y el director de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Estado de Guerrero (Capaseg), Arturo Palma.
El resto del recorrido lo realizaron a bordo de sus camionetas en un convoy de 15 vehículos.