Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

La UAG dejó atrás su carácter “rijoso” y retomó la academia, celebra Aguirre

*El DIF enseña a indígenas a usar la taza de baño, bañar a sus hijos y hablar español, afirma Laura del Rocío Herrera

Fernando Hernández

Chilpancingo

“Hace muchos años” a la Universidad Autónoma de Guerrero se le veía como una institución “rijosa”, pero “hoy ha retomado su camino académico”, dijo ayer el gobernador Ángel Aguirre Rivero durante un acto de entrega de becas en la residencia oficial Casa Guerrero.
Por su parte, su esposa Laura del Rocío Herrera, presidenta del DIF, durante el arranque de la colecta estatal de la Cruz Roja destacó que no fue hasta que llegó el Programa Transformemos Nuestro Entorno que muchos indígenas, nahuas, mixtecos y tlapanecos de la región de la Montaña aprendieron a “usar las tazas de baño”, bañar a sus hijos y “entender un poco de español”.
Ayer fue el segundo día consecutivo en el que el gobernador realizó actividades públicas en esta capital, que arrancaron por la mañana en la residencia Casa Guerrero.
Ahí Aguirre encabezó la entrega de becas a alumnos de la UAG y apoyos para habitantes de casas de estudiantes.
En ese evento el gobernador sostuvo que “hace muchos años a la UAG se le veía como una universidad rijosa, pero hoy sin renunciar a su legítimo derecho a manifestarse, la institución ha retomado el camino académico y a la certificación de sus unidades académicas, para preparar profesionalmente a sus estudiantes”.
Esa fue la postura oficial de Aguirre y fue difundida por mediante un comunicado por la Dirección de Comunicación Social del gobierno.
Así fue como el gobernador se refirió al pasado histórico de lucha y crítica con el que la universidad arrebató a los gobiernos la autonomía y se ganó el reconocimiento de la sociedad de Guerrero.
A la entrega de becas asistió el rector Javier Saldaña Almazán, quien el pasado 19 de marzo dijo en Iguala que la universidad ya es vista por la sociedad con “buenos ojos” y no como los “revoltosos como en los años setentas y ochentas”, tiempo en el que estudiantes, profesores y el pueblo demandaban mayor subsidio financiero y se gestaron proyectos como el de la universidad-pueblo impulsado en 1972 por el entonces rector Rosalío Wences Reza.

Entender el retraso que tienen nuestras comunidades

Por su parte, la presidenta del DIF dijo que el Programa Transfor-memos Nuestro Entorno enseñó a muchos indígenas a hablar un poco de castellano y a usar las tazas de baño.
“Una persona de Cochoapa el Grande, que me daba las gracias y me decía ‘Laura, gracias por enseñarnos a usar las tazas de baño, porque no las usábamos por no ensuciarlas’. Eso me estremeció la piel y hay que entender el retraso que tienen nuestras comunidades indígenas”, dijo Laura del Rocío Herrera.
Señaló además que los trabajadores del programa han ayudado a la población de la Montaña a “entender un poco el español, a limpiar las comunidades, a bañar a los niños, a llevarlos a la escuela, a enseñarles a preparar los alimentos”.
Recordó que en sus recorridos por la Montaña hubo gente que le decía “gracias por enseñarnos a comer el nopal, porque no lo tocábamos porque tiene espinas”.
A este acto que fue en la plancha del zócalo de Chilpancingo asistió la presidenta en Guerrero de la Cruz Roja, Susana Palazuelos, quien recibió el respaldo del gobernador, quien señaló que “quiero refrendar mi apoyo a la consejera nacional y delegada y le reitero que en esta tarea tan noble no está sola, seguiremos brindándole todo el apoyo”.

468 ad