Aquí la gente está en riesgo, las casas están sentidas desde la tormenta y se pueden caer

*Lamenta el profesor y dirigente de Rincón de Tlapacholapan, Alejandro Díaz Oropeza, que “a los pueblitos nos vienen a engañar con una despensa”, pero no llega la ayuda para la reubicación

Zacarías Cervantes

Rincón de Tlapacholapa / Mochitlán

El profesor y dirigente de esta comunidad, Alejandro Díaz Oropeza, pidió ayer que las autoridades federales, estatales y municipales que realmente vean por lo que están pasando las comunidades marginadas como ésta, porque hasta ahora, denunció, los recursos destinados para la reconstrucción de los daños ocasionados por la tormenta tropical Manuel se está quedando en las ciudades y en la zona turística.
Agregó que, por otro lado, se está dejando solas a las familias de las localidades rurales a donde solamente despensas han llevado las autoridades.
“La mera verdad es triste y preocupante que las autoridades municipales, estatales y federales, no se preocupen por reparar los daños provocados por las lluvias de hace casi siete meses, porque, cuando menos aquí, no hay ningún apoyo de ninguna autoridad”, manifestó el maestro que el lunes pasado encabezó a un grupo de habitantes de esta localidad en la marcha que realizó en Chilpancingo el Consejo de Organizaciones del Estado de Guerrero para demandar el apoyo del gobierno a los damnificados.
“Aquí, hasta ahora, todo son palabras, nos dicen que ya va a salir, que ya les vamos a ayudar, pero hasta el momento aquí la comunidad no ha visto nada de ese apoyo, y eso sí es preocupante”.
Díaz Oropeza denunció que los apoyos, si los hay, se están canalizando sólo en ciudades como Chilpancingo o Acapulco, “en los lugares turísticos, o en donde tienen cerca a la gente que los está presionando, pero hasta por aquí no llegan”.
Denunció que “aquí también la gente realmente está en riesgo, las casas están sentiditas, sabemos que vivimos en una zona sísmica y cualquier rato se puede venir un temblor y con una movidita se van a caer, eso es un riesgo para la gente que vive aquí”.
En referencia a los 30 mil millones de pesos que anunció primero el presidente Enrique Peña Nieto, en el marco del Plan Nuevo Guerrero, para contrarrestar los daños causados por la tormenta tropical Manuel y restablecer las condiciones de normalidad en Guerrero y los otros 67 mil millones que anunció recientemente como ampliación a los recursos de dicho Plan y que aseguró ya se están ejerciendo, el profesor se preguntó: “¿pero a dónde están?”.
Añadió: “cuando dice el gobierno hay tantos millones para ayudar a los damnificados, uno dice ya viene la ayuda, pero realmente no llega, aquí en los pueblos no llega. Se preocupan un poquito más en las ciudades, en donde tienen cerca a la gente y les conviene tenerla contenta para que no diga nada, y acá en los pueblitos nos vienen a engañar con una despensa”, se quejó.
Díaz Oropeza, quien diario viaja de Petaquillas a Rincón de Tlapacholapa para dar clases en la escuela de esta localidad, dijo que “no se vale que el gobierno esté engañando a la gente, sobre todo porque en comunidades como ésta la gente vive en situaciones muy precarias”.
Agregó que seguramente sí hay mucho dinero, “pero seguramente quedará en los bolsillos de otra gente, porque aquí no se ve que realmente haya una ayuda humanitaria real por parte de los gobiernos”.
Dijo que aquí los habitantes solamente están pidiendo la reubicación de todas las casas y el financiamiento de programas para sus cultivos, “ellos (los campesinos) tampoco quieren todo regalado, sólo quieren que les brinden un poco de ayuda, porque para trabajar se pintan solos”, dijo.
El profesor demandó que las autoridades vean realmente por la gente de comunidades alejadas como ésta, “solamente así veremos que realmente están invirtiendo dinero para la reconstrucción”, concluyó.