Instaló el crimen organizado un “régimen de terror” en Cuetzala con ayuda del alcalde Feliciano Álvarez, acusan

*Tenía por lo menos 20 millones de pesos para ganar la alcaldía, decía en sus mítines, afirman vecinos. Exigía a los comerciantes entre 500 y 700 pesos mensuales para los criminales antes de que fuera detenido en Iguala, mencionan. Las patrullas?de la Policía Municipal eran usadas para alertar a los grupos de sicarios de alguna operación federal o militar, agregan

Fernando Hernández

Cuetzala

En la administración del alcalde perredista de Cuetzala del Progreso, Feliciano Álvarez Mecino, la delincuencia organizada impuso a fuego y sangre un régimen de terror en los pueblos serranos de este municipio escondido entre las montañas de la región Norte de Guerrero.
Testimonios recogidos en las comunidades de Tianquizolco, Apletanca y Chilacachapa refuerzan las versiones oficiales de la complicidad del alcalde perredista con jefes del cártel La Familia Michoacana.
Luego de que la Procuraduría General de la República (PGR) detuvo en Iguala al presidente municipal por sus nexos y por formar parte activa de la célula delincuencial de la Familia Michoacana que lidera o lideraba Froylan Fernando Barrera Guzmán, detenido el 6 de diciembre del año pasado en Puerto Vallarta, Jalisco, los habitantes de estas comunidades permitieron que El Sur recorriera junto a ellos los territorios en los que se instaló lo que llaman “el régimen del terror”.
Los comuneros acordaron recibir al reportero en Tianquizolco, ubicada a 120 kilómetros al norte de Chilpancingo. Para llegar a ese pueblo hay que tomar la carretera que va hacia Iguala, y de ahí hay que enfilar hacia Cocula por el viejo camino de Metlapa, y conducir 20 kilómetros en un camino lleno de curvas.
En Iguala el contacto preguntó el por qué de la visita, los planes del viaje cambiaron y se decidió que por motivos de seguridad se tomara una? camioneta del servicio público de la ruta Iguala-Apetlanca. “Así vamos a llamar menos la atención de los malosos”, dice el hombre que accedió a guiar al reportero.
Al medio día, en la zona la temperatura oscila entre 34 y 40 centígrados, nada raro para esta época del año en la región Norte de Guerrero.
En la camioneta de pasajeros viajan 10 personas. Dos hombres conversan sobre la detención de Chano, como por estos rumbos se conoce al alcalde perredista detenido. A momentos pareciera que hablan en claves, temen que algún halcón pueda escucharlos, identificarlos y denunciarlos con los grupos de la delincuencia que siguen operando en la zona.
Fuentes oficiales han señalado que los tres pueblos forman parte de rutas de trasiego de enervantes.
Las carreteras y brechas de terracería forman parte de corredores que conectan con los municipios de Teloloapan, Apaxtla, Cocula, y tienen salida a Heliodoro Castillo y Arcelia, ejes de una disputa entre los cárteles del narcotráfico que se disputan el control de las plazas. De eso  están conscientes pobladores de estas comunidades.
En Tianquizolco un hombre recuerda que la escalada de violencia se intensificó a finales del 2012 cuando tomó posesión en su cargo el perredista Álvarez Mecino. Precisa que desde sus primeros días mostró un rostro autoritario e ignoró las demandas de estas comunidades.
El alcalde anterior había sido el también perredista Santos Gonzaga Miranda señalado de haber desviado recursos y de mantener un conflicto político particularmente con un grupo crítico de la comunidad de Chilacachapa, encabezado por el desaparecido ex comisario Venancio Vázquez Romualdo.
A pesar de que en la mayoría de los pueblos hay una simpatía por el PRD los pueblos en las pasadas elecciones “no le apostaron? con todo” a la candidatura de Álvarez Mecino, se indicó. No obstante eso no le importó mucho a Feliciano Álvarez y se ufanaba en las comunidades y en la cabecera municipal de que tenía por lo menos 20 millones de pesos para ganar la alcaldía.
La PGR ha señalado que se tiene evidencia de los nexos del alcalde con la delincuencia organizada incluso desde que era candidato a ese cargo de elección popular.
Comuneros consultados sostuvieron que cuando comenzó su gobierno impuso el pago a todos los pequeños comerciantes, tanto de la cabecera municipal como de las comunidades.
Era entre 500 y 700 pesos mensuales de los comercios, esta acción fue interpretada por muchos como un sistema para recaudar cuotas vía el Ayuntamiento para los grupos de la delincuencia organizada de los que el alcalde formaba parte.
También se hizo mención de que el todavía alcalde intentó gravar la extracción de agua para uso de riego , e imponer una licencia.
El año pasado ese escenario comenzó a hacer cada vez más tensas las relaciones entre el alcalde y los comuneros. Y mientras las relaciones se hacían más complejas los grupos delincuenciales imponían su ley en las comunidades.
En un comunicado que difundió la PGR se indicó que el alcalde operaba las actividades de halconaje para los grupos delincuenciales  y que participó en más de 10 secuestros.
Para los habitantes de los pueblos las relaciones entre el presidente municipal del PRD y “la gente mala” no era un secreto. Uno de los entrevistados dijo que nunca fue un secreto que Álvarez Mecino tenía una relación cercana con Froylan Fernando Barrera, Froy.
Algunos vecinos mencionaron que las patrullas?de la Policía Municipal eran usadas para alertar a los grupos de sicarios de alguna operación federal o militar.
Habitantes de las comunidades sostuvieron que el alcalde presumía que tenía relaciones con altos mandos del 40 Batallón de Infantería con sede en Ciudad Altamirano.
En el contexto de la escalada de violencia que azota a las regiones Norte y Tierra Caliente a principios de abril, el 40 Batallón de Infantería dejó Ciudad Altamirano en donde estuvo desde 1974, y se fue a San Luis Potosí.
Uno de los comuneros recordó que en marzo del año pasado alrededor de 45 hombres jóvenes y adultos, con uniformes militares, irrumpieron en Tianquizolco y dispararon a varias casas.
Lo anterior ha sido considerado en el pueblo como una represalia contra quienes desde enero del 2013 decidieron adherirse? a las filas de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG).
El 13 de marzo del año pasado los ataques de los grupos de la delincuencia organizada aumentaron y se intensificaron las voces que criticaban la administración del alcalde.
Para finales de marzo del año pasado la cifra de personas levantadas en las comunidades sumaba 13.
De las personas plagiadas, 10 regresaron con vida y tres todavía siguen desaparecidas.
Los desaparecidos son el ex comisario de Chilacachapa, Venancio Vázquez Romualdo y sus hijos, uno de ellos de 14 años.
Los pobladores mencionaron que en las comunidades y rancherías del municipio podría hablarse de unas 14 personas que siguen desaparecidas y un número indeterminado de personas que fueron asesinadas en enfrentamientos y balaceras.
Uno de los desaparecidos es el secretario de Obras Públicas de ese municipio, Raúl Delgado del Pilar, que era hasta el año pasado considerado uno de los hombres más cercanos a Feliciano Álvarez, hay versiones que indican que fue él quien lo relacionó con los líderes del PRD que palomearon su candidatura a la alcaldía, ya que era totalmente desconocido en el municipio.