México es donde más se batalla para consolidarse, dice el actor Demián Bichir

Minerva Hernández / Agencia Reforma

Ciudad de México

Creer que nadas con tiburones que en cualquier momento te devorarán es un sentimiento conocido por Demián Bichir, quien, a pesar de que en los últimos años ha trabajado arduamente por conseguir buenos papeles en otros países, aseguró que es en México donde más batalla para consolidarse.
“Es de verdad bien complicado porque tengo muchos años en este rollo y tengo que seguir bateando de hit para que me volteen a ver. Tenemos mucho tiempo haciendo cine y seguimos audicionando, y cada vez que nos llaman decimos: ‘va’. Constantemente tienes que estar convenciendo a la gente de lo que haces. Por alguna extraña razón los pocos trabajos que he hecho en Estados Unidos han llevado uno al siguiente, allá me mandan los proyectos directamente”, afirmó ayer el actor en entrevista, durante la promoción de la obra de teatro que protagonizará, Nadando con tiburones.
“No me quejo de nada, al contrario, estoy muy agradecido. Pero es cierto que tienes que estar peleando constantemente por tener buenos proyectos. No se trata de estar en la mente de la gente, porque si no, haría todas las cochinadas que me ofrecen”.
El actor compartirá escenario con Ana de la Reguera y Alfonso Herrera, bajo la dirección de su hermano Bruno Bichir, en un montaje que se estrena el 26 de enero en el Teatro de los Insurgentes.
“(La obra) es una crítica aguda a los juegos y escalas de poder. Personalmente creo en que las cosas con cariño son más fáciles y puedes conseguir más con buenos modos y buenos tratos, cuando me encuentro (en la vida real) con alguna especie de personajes como el que interpreto aquí, simplemente me doy la vuelta y me voy. No tengo ninguna necesidad de soportar los aires de poder de absolutamente nadie. No tengo jefes, tengo amigos con los que colaboro; ninguna persona debería soportar malos tratos, cualquiera debería anteponer la dignidad antes de, incluso, el pan que se lleva a la boca”, agregó Demian.
En Nadando con tiburones interpreta a Buddy Ackerman, un gran productor de cine en Hollywood que convierte en un infierno la vida de Gus (Herrera), un ingenuo escritor que soporta todo y sólo encuentra descanso con su novia Dana (De la Reguera), hasta que decide vengarse de su jefe.
En esta puesta, Demian y Bruno participan como coproductores junto con Claudio Carrera, Tina Galindo y Federico González Compeán, y tantas son las ganas de realizarla que el actor de American Visa rechazó un par de proyectos en Estados Unidos.
“Siempre hay un montón de cosas, ya dije que no a dos películas que se atravesaron, eran dos producciones norteamericanas, pero es un compromiso que tengo y no puedo tirar esta obra. La bronca me la echo con mis representantes allá, básicamente porque México no significa nada para ellos, pero sí para mí. Cada quien tiene que poner en la mesa sus prioridades, ellos saben las mías, me respetan y de pronto puede ser un poco duro decir que no a equis posibilidades, pero yo tengo mucha fe en mí mismo, y sé que van a venir más cosas”, dijo Demian.
El actor es el primer mexicano en ser nominado por Mejor Actuación Protagónica en Rol Estelar para los Screen Actors Guild Awards (SAG) por su trabajo en Una vida mejor, interpretación que también tiene postulado al Independent Spirit Award. Ambas entregas se realizarán en un par de semanas.
Demian rechazó opinar sobre las declaraciones que hizo el martes su ex pareja Kate del Castillo, en las que criticaba al gobierno mexicano y pedía al narcotraficante El Chapo Guzmán traficar con amor.

Prepara debut como director

Ya se involucró en la realización de una película, Hidalgo, la historia jamás contada, donde aparece como coproductor, pero Demian Bichir espera concretar el proyecto con el que debutaría como director de cine.
“Es un guión que escribí que quiero dirigir, para quien piense que es muy fácil para uno levantar un proyecto, yo soy la mejor prueba de que no. Es muy complicado, lleva mucho tiempo y los compromisos que tengo como actor no me han permitido estar al cien por ciento. Pero lo haré. Es difícil enamorar a la gente, que suelten la lana, juntar a un equipo, pero sucederá. Lo hago (inspirado) por la necesidad de sacar al monstruo que lleva uno adentro, como actor lo he hecho muchos años y siento que tendría muchas más posibilidades, como director, de tener control sobre muchas cosas, porque como actor a veces sólo puedes defender tu personaje. Todo ese bagaje que tengo de 30 años lo voy a llevar a un proyecto mío”, adelantó Demian, quien prefirió no revelar detalles.