El deceso de La Doña y las visitas de José Agustín y Tania Libertad

* Recuento de cultura y espectáculos de los primeros cuatro meses del 2002

Xavier Rosado * En el primer cuatrimestre del año 2002 ocurrieron varios eventos importantes en el ámbito cultural y de espectáculos de Acapulco, con visitas de personalidades de renombre así como la presentación de actividades que promovieron el desarrollo de la cultura en el puerto.
La primera de ellas fue el 12 de enero ocurrió con la presentación del libro de José Agustín Los grandes discos del rock 1951-1975.
Para el escritor José Agustín el libro Los Grandes Discos de rock 1951-1975 editado por Planeta es “un libro abundante de información acerca de lo mejor del rock, hay muchos tips, cosas que no se conocen; además el planteamiento no es plano, igual encuentran fábula, noticias apócrifas, relatos, ensayos, diálogos, cartas, todos los géneros, porque es un arsenal de recursos literarios”.
En entrevista, el autor consideró que su libro de rock puede ser del agrado de aquellos que desconocen este género “porque se enterarán de forma sencilla de lo mejor de esa época, si les gusta la literatura entonces les gustará”; en cuanto a los fanáticos de esta música afirmó que “no les caería mal, porque es abundante en información, además de que de todos los discos que hablo se pueden conseguir, ya sea en disco compacto o en LP”.
Al mes siguiente, el 15 de febrero comenzó sus actividades anuales la Orquesta Filarmónica de Acapulco, que para esta temporada 2002, hizo su presentación número 273 desde su fundación con un concierto que incluyó composiciones de Mozart, Berlioz y Rossini, bajo la dirección general de Eduardo Alvarez. El concierto lo presentaron en el teatro sede de la OFA, el Juan Ruiz de Alarcón en el Centro Cultural y de Convenciones de Acapulco.
En este mismo mes, el día 18 se presentó en la Plazoleta de Sor Juana en el Zócalo de Acapulco el primer número de la revista Ña kaan na valii savi que rescata la voz y la visión de los niños indígenas de la región mixteca de Guerrero que hablan la lengua ñuu yata saví que significa “El pueblo de la lluvia”.
El 21 de febrero el futbolista Jorge Campos se casó en una privada ceremonia en la casa club del fraccionamiento Tres Vidas con una canadiense, a la que asistieron solamente sus familiares y amigos más cercanos. Ningún medio de comunicación fue invitado a cubrir el evento, sin embargo, el arquero comentó a este diario que nunca había escuchado el dicho “en martes ni te cases ni te embarques”.
El 25 de febrero el embajador de Hungría Gyula Németh visitó el puerto para inaugurar una presentación de vinos húngaros. En este evento declaró que México y Hungría suman tres siglos de relaciones culturales a pesar de la distancia histórica y geográfica entre México y su país natal.
El mes de marzo trajo al quehacer cultural guerrerense el sexto encuentro de Pueblos Negros en las comunidades de Cuajinicuilapa y San Nicolás de la región de la Costa Chica de Guerrero y Oaxaca organizado por la asociación civil México Negro.
En este encuentro, en el que participaron más de 200 personas, se rescatan costumbres y danzas tradicionales de esa región como El toro del petate, Los diablos, los Apaches, la Tortuga del arenal y los bailes de artesa.
El 24 de este mismo mes, hizo una temporada en el puerto el cantante de boleros Carlos Cuevas quien estuvo una semana en el salón Banneret del hotel Calinda con su show Sólo soy de ti en el que incluyó canciones que le compuso especialmente Armando Manzanero. En este ciclo de conciertos presentó su disco La diferencia en el que incluye los temas inéditos como Para ya, Me acostumbré, Hoy viernes y No sé qué está pasando.
Casi al final de marzo, el día 29 la cantante peruana Tania Libertad presentó en el teatro Juan Ruiz de Alarcón su recital Himno al amor en el que además de canciones populares como Mañana de carnava de Antonio Bonfá, Noche de ronda y Rival de Agustín Lara y Siboney de Ernesto Lecuona; interpretó arias clásicas como O mi babbino caro de Puccini, Ave María de Schubert y Forza del destino de Giuseppe Verdi. Para este concierto fue acompañada por los 76 integrantes de la Orquesta Filarmónica de Acapulco bajo la dirección artística de Eduardo Alvarez.
Al mes siguiente, el 8 de abril falleció en la ciudad de México de un paro cardíaco la diva mexicana María Félix, el mismo día en que cumplía 88 años de edad.
La actriz en su carrera artística filmó 47 películas desde la legendaria La Generala en 1970 hasta El Peñón de las ánimas en 1942, de las cuales sólo filmó en este puerto Doña Diabla una película hecha por Tito Davidson y en la que interpreta a una mujer que tras sufrir un desengaño amoroso decide vengarse de los hombres tratándolos de la peor manera, explotándolos y llevándolos a la ruina.
Esa imagen de mujer fría y calculadora que mostró en esa película y que para muchos formaba parte de la verdadera personalidad de la actriz, fue retratada en muchas otras películas prácticamente escritas para ella.
Después de su fallecimiento a la una de la mañana del ocho de abril, el cuerpo fue velado desde las 17 a las 13 horas del día siguiente en el Palacio de Bellas Artes, donde se le rindió un homenaje.
A mediados de ese mismo mes, los días 13, 14 y 15 con el fin de hacer una temporada de tres días en el Salón Q, el grupo dominicano Merenglass llenó de merengue el puerto de Acapulco, con tres días de llenos absolutos y de interpretar los éxitos que les han dado fama internacional como el venao, La sopa de caracol y El baile del oso.
Además de sus bailes nocturnos, el grupo aprovechó para promover el disco que acababan de estrenar, su octava producción Mamborengue, en el que mezclaron el merengue dominicano con ritmos como mambo, cumbia, cha cha chá y danzón. Además grabaron en un yate de recreo del puerto, el primer videoclip de dicho álbum, para el que hicieron una amplia convocatoria durante sus conciertos a las chicas acapulqueñas.