Los recorridos de soldados y policías federales “dan confianza”, dicen visitantes

La playa Tlacopanocha lució llena este miércoles al mediodía, los turistas disfrutaron sus tranquilas aguas mientras los vendedores ambulantes recorrían mesas y sombrillas para ofrecer sus diversas mercaderías, mientras otros se hacían las famosas trencitas o se ponían los tatuajes de agua.
La mayoría de los turistas se resguardan bajo las sombrillas que son rentadas en 50 pesos mientras disfrutan las  frías cervezas para mitigar el fuerte calor. La tranquilidad de Tlacopanocha fue disfrutada más por los niños, que con sus flotadores o chalecos salvavidas coloridos se introdujeron en las frías aguas. Para resguardar la seguridad de los visitantes en esta playa, donde flotan cerca de los bañistas las lanchas y yates, fueron colocadas boyas para delimitar la zona segura para nadar o jugar.
Antes de tirarse en la arena y para mitigar un poco los fuertes rayos solares algunos se colocan bloqueador solar. Los ambulantes como siempre le ofrecen de todo al turista, aunque son menos molestos que en otras playas, pues permanecen en la explanada ofreciendo sus productos como son el agua de sabor para el calor, los chicharrones con chile, el ceviche, los rapados, chamoyadas o adornos de mar como la estrella marina o caracoles. Los trajes de baño o el pareo.
Por las más solicitadas fueron las señoras que hacen las famosas trencitas, pues según se sabe “quien no se las hace simplemente no pasó por Acapulco”.
También están los ambulantes que ofrecen los tatuajes de diversas formas.
Juan, un mesero de la zona, dijo que las ventas estaban bajas, pero que espera que ya el viernes, sábado y domingo mejores, aunque dudó que alcancen las ventas de Jueves y Viernes santos.
Disfrutando de la playa estaba el señor Emilio, del Distrito Federal, quien comentó que se vino con nueve familiares y recordó que las fiestas navideñas se la pasaron en el puerto. Que llegaron el martes y piensan irse el viernes. Comentó que hasta el momento los han tratado bien en el puerto, “hay mucha hospitalidad”.
Sobre el clima dijo que está bastante rico, “caluroso, pero muy rico, estamos contentos de estar aquí y hemos visitado todas las playas como Caleta, Caletilla, La Roqueta, La Quebrada”.
Finalmente, sobre la seguridad el visitante dijo que es buena, que “gracias a Dios no hemos tenido ningún contratiempo”, y que han visto bastantes soldados y policías federaleslo que les “da confianza de estar en Acapulco”. (Karina Contreras).