Pide el encauzamiento del Balsas y Cutzamala el alcalde de Pungarabato; amaga con protestas

El alcalde de Pungarabato, Reynel Rodríguez Muñoz, amagó con realizar manifestaciones contra la Comisión Nacional del Agua (Conagua), por la falta de atención al encauzamiento de los ríos Balsas y Cutzamala, que amagan con afectar nuevamente al menos a cinco pueblos y dos colonias.
Un grupo de vecinos de Las Querendas acudió al Ayuntamiento y dialogó con el alcalde, considerando la cercanía de las lluvias, y que el río Cutzamala afectó zonas muy cercanas a sus casas y que temen que con las primeras lluvias se meta a la parte habitada.
El alcalde consideró que la obra se encuentra contemplada en el presupuesto federal, para encauzar el río Cutzamala, y así evitar que se salga de su cause el río, metiéndose a las casas, pero a pesar de que ya visitó en varias ocasiones la dependencia, siguen sin responderle.
Agregó que el municipio va a realizar el encauzamiento con maquinaria propia, “porque urge que se resuelva el problema, el municipio tiene que atender el llamado de la gente y vamos a meterle máquina, y hacer lo que podamos, pero no será suficiente”.
Dijo que Conagua tiene que atender “este problema, con el presupuesto asignado, y ya hemos solicitado varias veces la obra”.
Insistió en que la gente le está pidiendo que se manifiesten y presionen al gobierno por la falta de atención, por lo cual está considerando la posibilidad de hacerlo, y de “tomar otras medidas para que miren hacia el municipio de Pungarabato”.
Recordó que no solamente Las Querendas tiene el problema del río Cutzamala, el cual es el que crece menos. Está la comunidad de Sinahua, Tanganhuato, Santa Bárbara y Tierra Blanca, que fueron severamente afectadas por las inundaciones de septiembre.
Recalcó que a la gente le preocupa la obra de encauzamiento del río, pues comenzaron a verse trabajos en el Balsas, a la altura de la colonia La Estación, en Altamirano, pero del lado de Amuco de la Reforma, en una acción que pretendía abrir un brazo de río, pero que se paró, por lo cual ahora se convirtió en un muro que avienta el agua aun más del lado de las casas de Altamirano. (Israel Flores / Ciudad Altamirano).