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El modelo neoliberal es un “fracaso real”, proclaman en el encuentro de izquierdas

 

*En 30 años ha profundizado la desigualdad y la pobreza, establecen en la Declaración México desde Acapulco

 

Daniel Velázquez

El modelo económico de los últimos 30 años es un “fracaso real”, porque el neoliberalismo ha profundizado la desigualdad y la pobreza, concluyó el Encuentro Internacional de la Izquierda Democrática, en la Declaración México desde Acapulco.
Este domingo, como parte de la clausura del encuentro, el presidente del Instituto de Estudios para la Transición Democrática, Ricardo Becerra, en representación del ausente José Woldenberg, leyó la Declaración.
Uno de los puntos establece la defensa de los derechos de las mujeres, pues “no hay izquierda democrática que no sea denodadamente feminista”.
En el documento de 10 puntos, con una extensión de 10 cuartillas, se cuestiona al modelo económico neoliberal. “¿Qué pasó con las re-formas liberalizadoras? ¿Qué han producido realmente los cambios estructurales, engendrados por la última modernización, la que va de los años 80 hasta la fecha? ¿Por qué sólo una vez, en un año, he-mos creado los empleos suficientes que reclama nuestra demografía? ¿Por qué dependemos de los salarios bajos? ¿Es verdad que necesitamos más de lo mismo?”.
“Los últimos 30 años, en México y en el mundo, reclaman una explicación”, precisa el documento.
“México es un mal ejemplo universal de ese debate: durante las últimas décadas el número absoluto de pobres no sólo no se ha contenido, sino que ha seguido creciendo, de 47 millones en 1994 a 61.3 millones en 2012. A casi tres décadas de cambios, globalización y ‘reformas estructurales’, la población pobre ha crecido en números absolutos y al cabo, sigue representando más de la mitad de la población, el 52.3 en 2012”, se lee en el documento.
El mismo texto establece que la izquierda democrática debe aprender de las lecciones del pasado, a repetir el esfuerzo de reforma de las sociedades que implicó el Estado de Bienestar y la democracia representativa.
En la declaración se reconoce como un reto construir sociedades cohesionadas, menos desiguales, habitables, decentes. Subraya que Latinoamérica es la región del mundo donde la brecha entre ri-queza y pobreza es más extrema, y que el libre mercado no la re-suelve sino que la agudiza.
El documento señala como ecuaciones sin resolver de la democracia latinoamericana “la necesidad de un presidente fuerte, pero acotado; capaz de tomar decisiones, pero lleno de controles; ágil, pero atento a las mayo-rías legislativas, mientras tenemos congresos que canalizan las demandas y necesidades de la ciudadanía, pero deben trascender los intereses de su clientela o sector; un Congreso que debate, evalúa, fiscaliza, pero que no ha de entorpecer el gobierno”.
En el texto se marca la diferencia entre “el izquierdismo primitivo”, que rechaza la negociación y los acuerdos, y la izquierda democrática que ve en los acuerdos la estrategia para incidir y transformar la sociedad plural.
También plantea que la izquierda debe aceptar el compromiso de vivir en un mundo plural, con el riesgo de ganar y perder elecciones.
La Declaración México destaca que “por primera vez, la izquierda latinoamericana hace política sin miedo, públicamente, con recursos propios y con posibilidades reales de ampliarse, reproducirse y acceder al poder”.
“Celebrar la democracia en América Latina no es un acto de complacencia, sino el reconocimiento de una conquista mayúscula, en la que la izquierda jugó un papel absolutamente decisivo”.
Antes de clausurar el encuentro, el ex presidente nacional del PRD, Jesús Ortega, planteó que la segunda edición del encuentro se lleve a cabo nuevamente en México y en las posteriores se haga fuera del país.
Indicó que en diversas parte del mundo se discute el fracaso del neoliberalismo y del camino que debe tomar la izquierda.
Dijo que México no puede negar la realidad comercial con América del Norte, pero tampoco puede desconocer la realidad histórica de que el país forma parte de América Latina.
Planteó que la izquierda en México puede construir una identidad propia con los antecedentes históricos que tiene, como lo es el período de las Leyes de Reforma (1855-1863) y el socialismo impulsado por Lázaro Cárdenas (1934-1940).
Indicó que la decisión de incluir Acapulco es porque está en Guerrero, que es uno de los estados con mayor identidad de izquierda y con mayor identidad perredista de toda la República.
Ortega Martínez envió saludos solidarios al alcalde de Bogotá, Colombia, Gustavo Petro, de quien dijo la derecha quiere derrocar de la alcaldía. También expresó fraternidad para Chile, para que concrete la construcción de una nueva Consti-tución democrática.

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