Se observan restaurantes llenos y pocas ventas en tiendas durante el festejo del Día de la Madre

*Algunos compradores se anticiparon al festejo para no tener que gastar más de lo presupuestado

Mariana Labastida

Aunque los restaurantes, principalmente de cadenas comerciales, se encontraban llenos para celebrar el Día de la Madre, no se observó movimiento de compras en tiendas del centro de la ciudad, los comerciantes de flores dijeron que estaba “floja la venta”.
Algunos compradores se anticiparon al festejo para no tener que gastar más de lo presupuestado, “lo que hicimos fue comprar algo con tiempo para no andar a las carreras y pagarlo poco a poco”, dijo Maricela Ortiz, mientras compraba un ramo de flores que fue lo único en lo que gastó ayer para complementar el regalo a su madre.
Por la mañana, se observaron restaurantes llenos, la celebración del Día de la Madre llevó a las familias a convivir en el desayuno y almuerzo, en algunos establecimientos había espera, por lo que así como se desocupaba una mesa era ocupada por nuevos comensales.
En el centro de la ciudad se ve vio gran cantidad de personas en las tiendas e incluso los vendedores ambulantes ofrecían insistentemente los productos que tenían a la venta para atraer a los compradores por tazas con frases de amor a mamá, llenas de chocolate y envueltas en papel celofán o por arreglos florales hecho con material reciclado, o alguna de las macetas con plantas naturales.
La venta de bolsas para regalos tampoco fue alta y quienes se dedican a envolver regalos tampoco tenían clientes, el movimiento de personas era constante por las banquetas, pero no para hacer compras; en las tiendas de ropa se podía ver a los vendedores en espera de clientes.
Los vendedores esperaban que las ventas incrementaran después de las 2 de la tarde que es el horario de salida de algunos trabajadores que laboran los sábados, y admitieron que en los días previos hubo compras aunque no como se esperaba.
También para los vendedores de flores no fue uno de los mejores días de venta, en el centro de la ciudad en diferentes cubetas se ofrecían rosas, una por 10 pesos, que variaba en el tamaño y el arreglo de cada una de puesto en puesto, más no se observó a muchos interesados en el costo de las mismas.
El costo de las flores se incrementó al doble en algunas florerias, sin embargo las ventas iban bajas, por ello disminuyeron los costos “el chiste es que salga la flor porque se va a marchitar con el calor y no vamos a recuperar ni lo que invertimos”, dijo el vendedor Rogelio Carmona Román.
En las colonias se podrían encontrar arreglos de flores naturales de los 100 a los 400 pesos, sin embargo las rosas eran de tamaño pequeño; algunos vendedores decidieron ir a Cuernavaca a comprar flores debido a que adquirirlas a los vendedores de mayoreo en calle Vallarta en el mercado Central, donde subieron un 50 por ciento los costos de los productos.
Los vendedores comenzaron a rematar las flores bajando de 100 a 30 pesos el costo de los arreglos cuando el cliente se los pedía con el objetivo de pagar un poco menos.
En algunos puesto se encontró la docena de flores en 80 pesos, que tenía un costo extra si se solicitaba arregladas con follaje y envueltas con papel celofán.