Cierra la SEG el jardín de niños Nueva Esperanza, antes Garabato

 * Una menor cuatro meses de nacida falleció en ese plantel por falta de cuidados el pasado 21 de agosto * El propietario Francisco Javier Martínez le cambió la razón social para pedir su registro a la SEG

Sergio Ocampo Arista, corresponsal, Chilpancingo * La Dirección de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de Educación de Guerrero (SEG), ordenó el cierre del Cendi Nueva Esperanza, antes Garabato, porque no reúne los requisitos de ley para su funcionamiento, informó el director de Comunicación Social de la dependencia, Tomás Benítez Cano.

El vocero de la SEG, explicó que la orden de cerrar el Cendi Nueva Esperanza, fue dada por la Dirección de Asuntos Jurídicos de la SEG y la Subsecretaría de Planeación. Se notificó a los padres de familia que tienen hijos inscrito en esa institución, que en un plazo de 24 horas los den de baja y retiren la documentación correspondiente.

Explicó que el cierre del plantel se debió a que les fue negado el registro de incorporación a la SEG por parte de la Subsecretaría de Planeación Educativa, por no contar con las medidas de seguridad obligatorias para su funcionamiento, y por no reunir los requisitos de ley.

Recordó que ese jardín de niños funcionó hasta hace unos meses con la denominación de Garabato, donde ocurrió el deceso de una menor por falta de cuidados.

El 21 de agosto de este año murió en esa instancia infantil una niña de cuatro meses de nacida, por lo que la SEG investigó el caso y encontró que el plantel no tenía el registro oficial de la SEG, además de no garantizar la atención educativa ni la seguridad física de los niños, por lo que el 2 de septiembre se optó por clausurarlo oficialmente.

Esto causó protesta por parte de los padres de familia, y junto con el personal del Cendi decidieron ubicarlo en otro lugar y cambiar la razón social, por eso crearon el Nueva Esperanza, y se pidió el registro oficial ante la SEG que investigó y al confirmar que era el mismo personal de El garabato, lo rechazó, pero hasta la fecha existe la averiguación previa en contra del propietario Francisco Javier Martínez Sánchez, por el delito de homicidio imprudencial.