Preocupa al arzobispo que se apruebe aquí la ley de sociedad de convivencia

* Llama a diputados locales a no contagiarse del DF

* Es una forma oculta de propiciar la unión de todo tipo de personas, incluso homosexuales, dice * Se congratula por la exoneración de Sandoval Íñiguez
Durante la celebración del día de la Sagrada Familia, el arzobispo de Acapulco, Felipe Aguirre Franco, mostró su preocupación porque en Guerrero “se copie” la ley que votará la Asamblea legislativa del Distrito Federal sobre “ley de sociedad de convivencia, donde se oculta una forma de ir tratando de equiparar las uniones de cualquier persona, aunque sean homosexuales”, porque la migración que existe en el estado de Guerrero sobre todo en la región de la Costa Chica y Costa Grande “está desbaratando muchos hogares” y fácilmente se forman otros para vivir “en adulterio”.
Aguirre Franco exhortó a los legisladores locales a “no ceder ante presiones de grupos, que han perdido el valor de la familia y la quieren equiparar a cualquier sociedad de convivencia”, que no “engendren un deseo de imitar” y que sean dueños de la verdad para que “no profanen los valores de la familia”.
Incluso, dijo que las personas que “aleguen” que existe un Estado laico y que la religión no debe influir en las leyes”, deben tomar en cuenta que “sí la religión no influye en la vida social, no sirve para nada”.
Durante su homilía, Aguirre Franco comentó que en los diputados locales del Distrito Federal hicieron una encuesta, donde el 61 por ciento de las personas, siendo católicos, están de acuerdo con la despenalización del aborto, “estos mismos legisladores hacen mimetismo y contagian a los demás organismos de los estados”.
Añadió que la Asamblea Legislativa está por votar una llamada “ley de sociedad de convivencia”, donde se oculta una forma de ir tratando de equipara las uniones de cualquier persona, aunque sean homosexuales, con el matrimonio estable y definitivo de dos personas de diferentes sexo; con el pretexto de proteger derechos de los solteros, no caen en la cuenta del daño tan terrible que le hacen al país, se va destruyendo la familia cristiana”.
Comentó que luego los estados “copian a la capital” y que en Guerrero, sobre todo en Costa Chica y Costa Grande, la migración está desbaratando muchos hogares, no sólo por la distancia y la poca presencia del padre, sino porque “fácilmente se forman otros hogares, para vivir en adulterio”.
El prelado católico dijo que hay muchos divorcios en el país, y de nuevo tomó como referencia al Distrito Federal, al comentar que un divorcio cuesta 125 pesos, mientras que por matrimonio se paga mil pesos, “y conste que lo que cuesta no es casarse sino vivir casados”, precisó.
Pidió que la familia “se restaure, se fortalezca a semejanza de la familia de Nazaret, ese es el clamor”, porque se siente contaminados “por una corriente laicista por los valores, depredadora de la familia”.
El arzobispo dijo que “hemos lanzado un SOS por la familia que amenaza irse a pique, invasores de corazón negro han invadido el santuario de la vida, lo más sagrado que Dios ha hecho sobre la tierra; quiere que la familia se respete, que se salvaguarden los valores de la familia porque está en peligro de irse a pique”.
Al finalizar la misa, el encargado de la Pastoral Familiar de la Arquidiócesis, el sacerdote Miguel Ángel Cortes comentó que diversos grupos católicos –unas doscientas personas- hicieron una marcha desde el asta Bandera a la Catedral de la Soledad para enviar un mensaje a las familias de “que este día está dedicado a todas las familias y en la iglesia se celebra tomando como modelo a la sagrada familia de Jesús”.
Dijo que en la marcha participaron los movimientos Familiar Cristiano, Encuentro Matrimonial, Encuentros Conyugales, Comunidad de Betania, Comunidad de Jóvenes y Adolescentes.
Dijo a reporteros sobre la exoneración que efectuó la Procuraduría General de la República (PGR) al cardenal Juan Sandoval Íñiguez, que “desde hace tiempo ya se había dado la exoneración, que bueno que haya publicidad, era muy justo y necesario, de la exoneración porque realmente no había ningún delito que perseguir”
Añadió que “no cabe duda que se inventó para tratar de empañar, soslayar, evadir la atención sobre el caso de Juan Jesús Posadas Ocampo; quiere decir que va por buen camino o que hay voluntad para hacer las cosas”.
Aguirre Franco afirmó que el cardenal Íñiguez está “integro en todos los sentidos” y que del posible enriquecimiento ilícito, comentó que las cuentas que están a su nombre en los bancos, son de las parroquias, porque la organización de Asociaciones Religiosas tienen que responder ante Hacienda; no hay ningún afán de lucro, todo es para servir para la comunidad” y que no tuvo un enfrentamiento verbal con el ex procurador Carpizo, sólo “ha defendido la verdad y ha sido coherente con sus afirmaciones”.
El prelado católico no hizo referencia a la reunión que sostuvo con el gobernador René Juárez Cisneros junto a otros arzobispos como el de Chilpancingo, Efrén Ramos Salazar; Tlapa, Alejo Zavala Castro; el recién cambiado a la arquidiócesis de Netzahualcóyotl, el de Ciudad Altamirano, Carlos Garfías Merlos; el de Lázaro Cárdenas, Salvador Flores; y el obispo emérito de Acapulco, Rafael Bello Ruiz, en la residencia de Casa Guerrero y que algunos medios impresos dieron a conocer ayer domingo, aunque no se precisó fecha.
En su mensaje para las familias en 2004 pidió promover los valores de la familia y no dejarse llevar “por los malos ejemplos de otros países”; aunque sean desarrollados, y dijo que vislumbra en Guerrero “mucho optimismo, a pesar de los presagios de tormenta que hay en los horizontes de México y del mundo, tengo optimismo que muchas de las acciones que se han emprendido, se van a fortalecer en el 2004”.
Además mencionó que el próximo año en Guerrero será de “crecimiento en la madurez democrática”, y que pedirá que “se aventaje la nueva catedral”. (Magdalena Cisneros).