Resguardarán en el Jardín Botánico las especies de árbol de linaloe y palo morado

Xavier Rosado * El Primer Club de Jardinería de Acapulco celebró el sábado el primer año de haber inaugurado el Sendero Botánico, que recientemente fue calificado por arquitectos especializados como Jardín Botánico y que resguarda especies en extinción como el árbol de linaloe y el palo morado.

El sendero, ubicado en la zona de reserva ecológica de la Universidad Loyola del Pacífico, reunió los requisitos necesarios para ser considerado como jardín, mismo que fue planeado para convertirse en un atractivo de turismo ecológico de Acapulco.

Para continuar con la labor de ampliación de este lugar recreativo y didáctico, las 36 socias que conforman el Primer Club de Jardinería fundado por Esther Pliego de Salinas, organizarán este sábado en el Club de yates una cena-baile de gala en la que pretenden conjuntar 50 mil pesos para la construcción de una terraza y añadir a las especies en exhibición, el árbol de linaloe, natural de Guerrero con el que se confeccionan las cajitas de Olinalá.s

El jardín botánico cuenta actualmente con una colección de palmas de 20 especies diferentes, plantas de ornato de la selva tropical y árboles de cacahuananche, pero, según declaró la presidenta del Club de Jardinería de Acapulco, su principal objetivo es preservar y plantar más palo morado, “el arbol guerrerense por excelencia que desafortuanamente se encuentra en peligro de extinción y que es necesario conservar y hacerlo proliferar”.

Agregó que ya se está buscando apoyo del gobierno del estado para llevar al Jardín Botánico varios árboles de linaloe que debido a su tala indiscrimada también se encuentra en peligro de extinción.

“El gobierno del estado cuenta con algunos lugares de conservación de estas especies, vamos a pedirles que nos den algunos para empezar a cultivarlos en el jardín y sobre todo que estén en exhibición para que todos sus visitantes conozcan esta especie de la que dependen tantos artesanos guerrerenses”, comentó la presidenta del club.

De las seis hectáreas que han sido designadas para el desarrollo del Jardín Botánico, explicó que hasta la fecha solamente 500 metros lineales han sido cultivados y clasificados para su exhibición.

Este terreno, perteneciente a la Universidad Loyola del Pacífico, fue otorgado al Club de Jardinería como reserva ecológica para su desarrollo como Jardín Botánico como beneficio a Acapulco y para que represente una opción más en los tures de turismo ecológico que se ofrecen en el puerto.

Mencionó que el proyecto arquitectónico es del arquitecto especialista en paisajes, Jorge Madrigal quien donó el plano de las seis hectáreas que eventualmente conformarán el Jardín Botánico de Acapulco.