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A puerta cerrada rinde su último informe el alcalde priísta de Petatlán

  Maricela Santos, corresponsal, Petatlán * En medio de un paro laboral de policías municipales, el alcalde de Petatlán, Jorge Ramírez Espino, rindió su último informe de gobierno en una sesión de Cabildo a puerta cerrada, a la que sólo se permitió el acceso a 25 personas.

Mientras duró el acto, unos 20 agentes –de un centenar inconforme– se mantuvieron en el acceso principal del ayuntamiento en actitud de protesta y a la espera del alcalde para plantearle sus demandas, pues no pudieron entrar debido a que el inmueble estuvo cerrado.

Al final, a la manifestación de inconformidad se sumaron algunos trabajadores administrativos, a quienes se les debe su salario de la pasada quincena y quienes, igual que los policías preventivos, reclaman el pago del aguinaldo antes de que deje la administración Ramírez Espino.

Cuando el oficial mayor, Gerardo Ríos Hernández, vio a los policías ante el acceso cerrado salió y los conminó a dejar el lugar mientras terminaba el acto a puerta cerrada.

Tan pronto terminó, el síndico José Salas Rivera bajó a atender a los preventivos junto con el oficial mayor por instrucciones del alcalde. Les dijeron que el aguinaldo les será pagado el 28 de diciembre y que esperan que les libere una partida presupuestal final el gobierno del estado.

Pero el reclamo y la posición del centenar de policías, entre preventivos y turísticos, fue tal que Salas Rivera se comprometió con ellos a que se les pagará el aguinaldo que les corresponda. “Yo veré cómo, pero todavía no es tiempo de que se les dé; por ley se estipula que esto es en diciembre, pero del salario no sé que reclaman porque ya se les pagó”, les dijo.

En la reunión informal algunos colaboradores administrativos del municipio, de las áreas de educación y salud, señalaron que a ellos les deben toda la quincena y que no saben en qué se basó el pago selectivo de la primera quincena de noviembre. El oficial mayor dijo que el tesorero municipal, Joaquín Sosa Rosas, conseguía recursos en el Congreso del Estado y en la Secretaría de Finanzas, y que tan pronto los consiguiera se cumpliría con el pago de salarios y del aguinaldo.

Aún así los trabajadores del municipio no salieron del inmueble ni aceptaron la respuesta, sino que pidieron fecha y compromiso firmado. Pero las autoridades se negaron.

Luego se aglutinaron para esperar al alcalde. Un grupo de preventivos inconformes se apostó en la entrada del túnel por el que entra el edil. Otros en las escaleras.

Dentro del recinto, Ramírez Espino recibía abrazos de sus funcionarios de primer nivel y de su familia.

El edil usó las viejas escaleras e intentó salir por la puerta principal, que estaba cerrada, pero nadie intentó abrirle aunque pidió que le llevaran las llaves.

Luego caminó despacio hacia donde estaban los preventivos, y un grupo se acercó a pedirle que les pague puntualmente el aguinaldo. El primer edil petatleco dijo que estaba en tiempo y que se les cumplirá en diciembre. Cada que un policía le exigía el pago de su salario, el alcalde lo callaba a gritos: “Déjame hablar, yo soy el presidente, tu eres un simple policía. Cállate”.

Luego se exasperó tanto que alzó los brazos como para agredir a un policía. El brusco movimiento del alcalde logró ser detenido por su esposa, la ex aspirante a diputada del distrito 12 por el PRI, Emma Suazo de Ramírez, y por su hija.

Pero el alcalde no pudo irse del lugar en su Suburban, ni su esposa, ni el síndico, porque los preventivos colocaron previamente dos patrullas para impedir la salida de los vehículos desde que advirtieron que se quedarían en plantón.

Alguien le acercó a Ramírez Espino un vehículo que no era el suyo mientras el síndico tomaba un taxi para ir a una comida que –se filtró– se daría tras el informe para festejar además el cumpleaños del edil.

Mientras esto sucedía, el secretario general del ayuntamiento, Gustavo Peregrino Ramírez, entregaba la oficina a quien será su sucesor, el abogado perredista Gerardo Segura León, y al síndico electo Jacinto Javier Segura. Asimismo se informó que en el transcurso de la tarde se entregó la Dirección de Registro Civil y parte de la Oficialía Mayor.

De lo que se pudo obtener del informe rendido a puerta cerrada, destacan cien obras que supuestamente ejecutó el ayuntamiento este año con recursos de los gobiernos estatal y federal.

Finalmente, Ramírez Espino explicó que el acto a puerta cerrada de su último informe de labores fue por “austeridad”, y que no invitó al alcalde electo “porque fue una cosa sencilla nada más con los regidores, no hicimos más invitaciones ni nada”.

Respecto al selectivo acceso a la ceremonia dijo que su secretaria se tomó esa atribución e incluso la reprendió por no haber dejado entrar a la prensa, aunque había instrucciones precisas de él de no permitir el ingreso a su informe e incluso de que los autorizados de último momento pasaran por un túnel que conduce a su privado.

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