Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

El retrato de la realidad social, tema básico en el teatro mexicano: Minerva Morales

Xavier Rosado * La dirección general de Vinculación Cultural y Ciudadanización y la dirección de Capacitación Cultural del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) presentó en el auditorio Juan García Jiménez de la Casa de la Cultura de Acapulco, el décimo cuarto módulo del Diplomado para Promotores y Gestores Culturales del Estado de Guerrero.

La penúltima sesión del diplomado estuvo a cargo de la dramaturga Minerva Morales, quien ofreció una clase acerca de la dramaturgia contemporánea y el hecho escénico.

Dicha sesión se efectuó en el escenario del mencionado auditorio con una asistencia de 30 estudiantes que obtendrán su diploma como promotores culturales el 23 de noviembre al concluir los quince módulos que lo integran.

En esta ocasión, la cátedra comenzó con el anális de Héctor Azar acerca de la función social del teatro y la relación del teatro con la sociedad.

“El teatro es una manifestación artística e ideológica, en el escenario el actor encuentra el medio de expresar su pensamiento, de reflejar la realidad de su sociedad para poder entenderla, el teatro es manifestarse ideológicamente ante el espectador de manera divertida, entretenida, inteligente y estética”, expresó la dramaturga.

El curso también se centró en los diferentes aspectos que un productor tiene que considerar para montar un evento teatral, el espacio escénico, la distribución presupuestaria, la organización de los ensayos y la coordinación de las presentaciones.

También habló acerca del desarrollo del teatro, partiendo del teatro prehispánico que se componía de representaciones líricas y dramáticas en un contexto místico y del teatro de la colonia que tenía un objetivo evangelizador y religioso.

“El teatro en el siglo 19 se caracterizó por la construcción de nuevos y suntuosos locales y la llegada a México de artistas y compañías extranjeras. Aún así, la dramaturgia mexicana tuvo la influencia de los clásicos y el romanticismo inglés”, definió Minerva Morales.

En este periodo, la dramaturga resaltó la labor de Manuel Eduardo Gorostiza y Marcelino Dávalos quienes abrieron el terreno para que surgieran estrellas mexicanas como Angela Peralta, Esperanza Iris y Virginia Fábregas.

Dijo que el teatro del siglo 20 “no dejó de sentir el efecto de la revolución, por lo que tendió a llevar en sus argumentos, líneas cargadas hacia una crítica social y política.

Minerva Morales mencionó que el teatro de Salvador Novo, Xavier Villaurrutia, Celestino Gorostiza, Gilberto Owen y Antonieta Rivas Mercado fue considerado un teatro experimental, del que se desprende el teatro moderno por dar origen a la diversidad de temas y técnicas de montaje.

“Esto da pie a que ya en la década de los sesentas del siglo pasado, llegue al escenario dramático figuras como Emilio Carballido, Rafael Solana, Margarita Urueta, Hugo Argüelles, Rodolfo Usigli, Héctor Azar y Elena Garro, quienes exploran cada vez más el interior de los seres y de los sistemas que los rodean”, expresó la dramaturga.

“Carballido se dio a conocer gracias a obras como Silencio, pollos pelones ya les van a echar su maíz, una farsa de gran humorismo acerca de las costumbres y los personajes de la baja política de su tiempo y Medusa, que le ganó el premio Ruiz de Alarcón a la mejor obra inédita de 1968”, recordó la especialista en arte escénico.Concluyó que en la actualidad, el teatro en México sigue funcionando como un espejo de la sociedad, dando a su cada vez más reducida audiencia, “algo qué descubrir y qué mejorar sobre la sociedad y la individualidad mexicana”.

468 ad