Retiran del mercado 63 mil sacos de café de baja calidad; 40 mil son de Guerrero

 * Pide René Juárez a la federación apoyo para los cafetaleros de Guerrero, que están en las zonas más vulnerables * En la reunión nacional de cafetaleros pulverizan el grano que se empleará como fertilizante

Alfredo Mondragón * Productores de cuatro estados del país retiraron del mercado 63 mil sacos de café de baja calidad, equivalente al 5 por ciento de la producción anual, un costo de aproximado de 30 millones de pesos y un peso de 3 toneladas 780 mil kilos, en cumplimiento de la norma internacional de calidad 407, que entró en vigor en enero de este año y como ejemplo al resto de los países exportadores de que en México se produce el grano de calidad.

Guerrero aportó 40 mil sacos de café de baja calidad, que serán pulverizados y utilizados como fertilizante en la siembra del aromático; Chiapas 5 mil; Puebla 2 mil 500; Veracruz 2 mil 500 y 13 mil sacos el resto de los 12 estados integrantes del Consejo Nacional del Café como parte de los acuerdos internacionales para el mejoramiento de la calidad del grano, que entró en vigor este año.

Guerrero ocupa el quinto lugar nacional en producción de café con una cosecha anual de 100 mil quintales (cada quintal equivale a 69 kilos, es decir, seis millones 900 mil kilos), un padrón de 22 mil productores en la entidad, una superficie de 40 mil hectáreas destinadas al cultivo de este grano, pero cerca del 25 por ciento de las tierras están ociosas debido al precio bajo en el mercado internacional.

El secretario de Desarrollo Rural en el estado, Héctor Popoca Boone, informó que los productores que aportaron el café de baja calidad para su pulverización recibirán una cuota de recuperación de 4 pesos el kilo, que se empleará como fertilizante orgánico.

El director ejecutivo de la Organización Internacional del Café, Néstor Osorio, dijo que la acción de México de pulverizar el café de baja calidad “no tiene precedentes, y pone a México en el mapa de las decisiones políticas” debido a que con la calidad “podamos exigir un precio, un mercado de vendedores y no de compradores”.

El secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, Javier Usabiaga Arroyo, calificó el hecho como un parteaguas de la historia de la producción e informó que los productores del aromático han logrado que México se encuentre en el sexto lugar nacional con una producción anual de 5 millones de sacos de 60 kilos y una exportación de 3.5 millones de sacos.

Este domingo se realizó la reunión nacional de cafetaleros en la que se dio a conocer la pulverización de 63 mil sacos de café de baja calidad, en presencia del secretario de Agricultura, el gobernador de Guerrero, René Juárez Cisneros, el gobernador de Veracruz Miguel Alemán Velazco, el alcalde Zeferino Torreblanca Galindo, el presidente del Consejo Nacional del Café, Roberto Gisemann y el director ejecutivo de la Organización Internacional del Café, Nestor Osorio.

Usabiaga refirió que el sector cafetalero mundial enfrenta su peor crisis de la historia debido a la sobreproducción del grano que ha generado una sobre oferta mundial, lo que aunado a un bajo consumo “ha propiciado que los precios internacionales  se hayan ido a 50 dólares por quintal (69 kilos) mientras que el costo de la producción es de 70 dólares”.

Dijo que el gobierno federal en su política cafetalera elaboró un padrón nacional, un programa emergente para el levantamiento de cosecha, un fondo de estabilización del precio del café, apoyos a proyectos productivos, una intensa campaña de promoción y el programa de retiro de café de cualidades inferiores, en el que restituye el 2 por ciento de la cosecha a los productores.

Por su parte, el gobernador de Guerrero René Juárez Cisneros, dijo al secretario de Agricultura, Javier Usabiaga que “hoy más que nunca el sector cafetalero requiere el apoyo decidido y creciente del gobierno porque usted y los productores creemos en las bondades del café; estamos seguros que impulsándolo y llevándolo hasta sus últimas consecuencias, este esfuerzo de mejorar la calidad es lo único que nos va a permitir reinsertarnos en los mercados internacionales”.

Juárez Cisneros solicitó a Javier Usabiaga todo el apoyo para los productores de café del estado y del país porque es ahí “donde están las zonas de mayor vulnerabilidad y tenemos que dirigir nuestra acción sistemáticamente”.

El gobernador del estado felicitó a los productores de café por la pulverización del aromático de calidad inferior porque “es un acto de responsabilidad, de congruencia y del gobierno de cumplir sus compromisos internacionales” y reconoció la voluntad de coordinación del secretario de Agricultura con el estado para instrumentar programas para la producción y comercialización del grano.

Lourdes Castañeda Olivares, integrante de la Organización Nacional del Café de México, manifestó el respaldo al programa de mejoramiento de calidad del café, al eliminar el 5 por ciento de la producción anual tanto del consumo interno y externo, pero lamentó que una buena parte de los comercializadoras “no cumplieran con el compromiso acordado”.

Sugirió a las autoridades buscar el mayor apoyo financiero para que Vietnam cumpla con su anunciado plan de retiro de plantaciones de café y el cooperar con el programa de calidad; también aconsejó entrar en negociaciones con Brasil para que reduzcan su cosecha debido a que “esto llevaría a una mejoría en los precios internacionales del café”.

La representante de los cafetaleros dijo que “en el campo existe el riesgo de que una parte de la cosecha no se levante debido a la plaga de broca que se ha convertido en una fuerte amenaza a la cafeticultura y tendrá un gran impacto en la calidad”, por ello dijo que es necesario evitar la proliferación de este flagelo “avanzando en la entrega de recursos del fondo de estabilización de precios”.

El director ejecutivo de la Organización Internacional del Café, Néstor Osorio, dijo que la acción de México de pulverizar el café de baja calidad “no tiene precedentes que pone a México en el mapa de las decisiones políticas” debido a que con la calidad “podamos exigir un precio, un mercado de vendedores y no de compradores”. Dijo que “si todos los países siguen el ejemplo de México (de pulverizar el café de mala calidad) en un año podremos sacar del mercado entre 5 y 6 millones de sacos y pronto volveríamos a una posición de equilibrio entre la oferta y demanda”.