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Dice Hugo Vázquez que fue víctima de una infamia y una venganza política

Sergio Ocampo Arista, corresponsal, Chilpancingo * El ex rector de la Universidad Autónoma de Guerrero, José Hugo Vázquez Mendoza, señalado por la Comisión de Honor y Justicia del Consejo Universitario de haber desviado unos 25 millones de pesos, aseguró que fue víctima de una infamia y de una ligereza de parte de quienes estuvieron en su tiempo utilizando esta situación como arma política en contra de él y de su familia, “fue una venganza política”, aseguró.

Entrevistado el jueves por la noche, luego que la nueva Comisión de Honor y Justicia que preside Arturo Colín Cedeño, aseguró no saber de qué se le acusaba: “Yo la mayoría de las acusaciones las escuché por medio de la radio y de la prensa, en donde se hablaba de varios millones de pesos que preocuparon no sólo a su familia, sino a mi organización, Acción Revolucionaria, y a los universitarios en general”.

Acompañado de los dirigentes de Acción Revolucionaria, el figueroísta Gabino Olea Campos y Samuel Reséndiz Nava, preguntó si en una institución como la UAG que no tiene recursos, de dónde puede sacarse esa cantidad de dinero, y aunque no mencionó sus nombres, Vázquez Mendoza señaló como responsables de esta situación a los anteriores miembros de las comisiones de Honor y Justicia, y de Finanzas: “Ellos fueron quienes publicaron eso y se lo dieron a la prensa, ellos fueron los responsables”, aseguró.

Las comisiones a las que hace referencia el ex rector, la de Honor y justicia estaba representada por el decano de la UAG, Arturo Ulloa Sánchez, Eloy Cisneros Guillén, Carlos Berber Reséndiz; y la de Finanzas por Maclovio Sautto Vallejo, Augusto Brun y Rodrigo Carmona Casiano, estos dos últimos funcionarios de la actual administración.

Hugo Vázquez anunció que están haciendo una investigación a fondo para saber quienes orquestaron la supuesta campaña en su contra: “No tengo la certeza de quienes fueron, la sospecha es que fue la gente que estuvo metida ahí, y más bien se trató de una revancha o una posible venganza política”.

Visiblemente emocionado insistió en que durante estos tres últimos años hubo un daño moral para él y su familia, pero también para la comunidad universitaria ya que se dio a entender que “los universitarios somos mañosos y corruptos, y eso habría que sancionarlo con fuerza por parte del Consejo Universitario”.

Al conocer que el Consejo Universitario le fijó un plazo de 60 días para que presente las pruebas de su inocencia, Hugo Vázquez expresó tajante que “primero espero que me digan de qué se me está acusando para que yo les pueda decir que no tienen ninguna razón de hacer la acusación”.

Señaló que si el propio rector Nelson Valle reconoció durante la sesión del Consejo Universitario que “no había la necesidad de traerlo hasta estos tiempos, pues entonces es evidente que no hay nada de qué acusar a Hugo Vázquez, o alguien de mi administración, y qué prueba pueden tener si las auditorías que me practicaron y las que vienen después no señalaron ninguna anomalía al respecto”.

Sin embargo, aceptó que si hay algún funcionario de su administración que tuviese algún problema o error administrativo que entonces se le cite a declarar para que se le cuestione sobre los errores que pudo haber cometido, “y ahí ni yo, ni mi organización va a meter las manos”.

Atento escuchaba el ex rector Gabino Olea Campos, y luego de una breve pausa, opinó que al perder Acción Revolucionaria el proceso electoral, automáticamente tendría que haber una de moralización, ya que todo grupo triunfante trata de abordar los prestigios de los que antes ellos dirigieron “y todo eso quiso borrarse”.

Olea Campos cuestionó que se diga “que durante mi periodo no se hizo nada por la UAG, ni en el de Hugo Vázquez, pero yo me siento muy satisfecho de que tuvimos la oportunidad de acabar con la universidad de palapa, no sólo por construir las aulas que faltaban, el equipamiento, porque siempre dije que pasamos de la falta de gises al uso de internet”.

Dijo que se ha defendido a Hugo Vázquez porque durante todos estos años hubo un daño moral muy grande para su familia, “porque aquellos que instrumentaron esa infamia no pensaron en el daño que estaban provocando; a pesar de las divergencias que tuve con el compañero me acerqué a su familia, platicamos constantemente con sus hijas, sobre todo porque en las escuelas y en todos lados siempre les decían: ‘ahí van las hijas del ratero y del mañoso, y eso no debe pasar otra vez en la UAG”.

Olea Campos manifestó que ante de actuar en consecuencia, primero AR estará atenta para ver cómo se mueven las fuerzas políticas en este proceso, porque hoy quedó claro que fue una infamia que se montó en contra de Hugo Vázquez y en contra de la organización, y con base al comportamiento de las personas y de las organizaciones es como se definen las políticas de alianzas al interior y fuera de la universidad”.

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