CARTAS (Insiste en que eran aviadores los que ganaron la demanda a CAPAMA)

 Señor director:

 Le solicito de la manera más atenta, tenga bien publicar carta en su prestigiado diario. El pasado 26, en su sección Cartas, aparece una que se titula “Responden a Noel Rosas dos despedidos de Capama que ganaron el juicio laboral”, suscrita por quien dice ser licenciado Eutimio Rodríguez Maganda y María Elena Salmerón, quien el primero ha vivido al amparo de Fermín Gerardo Alvarado Arroyo y que ha laborado en tres dependencias de gobierno al mismo tiempo, del cual el hoy magistrado fue titular y que sin escrúpulo alguno defraudó a la CAPAMA, cobrando un salario que no devengó como lo demuestro en párrafos más adelante.

Primeramente se indica en esa carta que el señor “Maestro en Ciencias” Fermín Gerardo Alvarado Arroyo, nada tiene que ver en el asunto laboral que presentaron Eutimio Rodríguez Maganda, María Elena Salmerón y otros, ante la autoridad laboral diciendo ser víctimas y violados sus derechos laborales. Al respecto reitero como ya lo hice saber anteriormente: dichas personas fueron aviadores de la paramunicipal como se desprende de las mismas confesiones que han realizado en las demandas que han presentado ante los tribunales laborales. En la carta publicada en este medio, se señala que el suscrito pretende litigar en los medios de comunicación (cuando) lo que me interesa es que la sociedad conozca la  verdadera identidad inmoral de dichas personas, porque el hecho de haber obtenido un resultado favorable en el procedimiento laboral, no implica que tengan la razón o que no hayan incurrido en actos inmorales.

Se señala en la carta que el señor Eutimio Rodríguez Maganda laboró en el área de recursos humanos, que no existen familiares de Alvarado Arroyo que hubiesen laborado para la CAPAMA, al respecto es importante señalar que el señor Rodríguez Maganda (aviador), únicamente se presentaba a cobrar su jugoso salario sin prestar un servicio personal en el organismo, porque precisamente en el periodo que dice haber prestado sus servicios para CAPAMA se encontraba laborando para el Colegio de Bachilleres (Cobach), como él mismo lo confiesa en un escrito que interpuso en contra de esa institución, de ello se tienen las pruebas contundentes para acreditar tal afirmación.

El señor Rodríguez Maganda manifiesta en la demanda que presentó ante los tribunales laborales de fecha 25 de noviembre de 1997, que laboró para la CAPAMA del 10 de octubre de 1996, abscrito a la Coordinación de Recursos Humanos, y a partir de abril de 1997, como auxiliar de la Dirección General, con una jornada de las 8 a las 16 horas y de las 18 a las 23 de lunes a sábado, que percibía la cantidad de $5,184.40.00 quincenales, lo cual de esa cantidad $3,000.00 se los obsequiaban como compensación al salario, que laboró semanalmente 78 horas. Asimismo, el señor Rodríguez  Maganda presentó demanda laboral en contra del Colegio de Bachilleres (Cobach), de fecha 8 de diciembre de 1997, expediente número 787/2000, en el cual confiesa haber prestado sus servicios a partir del día 2 de septiembre de 1984, al 13 de octubre de 1997, en dicha demanda argumenta que hasta el día 31 de diciembre de 1996 ocupaba el puesto de profesor del área de matemáticas, en el plantel número 1 de Chilpancingo, Guerrero, con 40 horas definitivas y tiempo completo, y que percibía un salario de $15,000.00 mensuales; de lo anterior se desprende que nunca laboró para la CAPAMA, porque si dice haber estado laborando en el Cobach durante el periodo que dice haber estado laborando en CAPAMA (10 de octubre de 1996 al 31 de julio de 1997), se advierte claramente que nunca prestó sus servicios personales para la Comisión, al existir duplicidad de los empleos y horarios, concluyéndose que el señor Rodríguez Maganada fue uno de los beneficiados y aviador de la CAPAMA, protegido por el ahora magistrado. Aunado a todo ello dicha persona actualmente se encuentra ocupando un puesto de supervisor en la Secretaría de Educación Pública, desde el año de 1994 hasta la fecha, bajo la clave EO201/120108, lucrando con dichas instituciones, es decir, ha “laborado” al mismo tiempo en las tres dependencias, además de que recibirá jugosa cantidad de $300,000.00  y fue reinstalado por parte del Cobach, además de laborar como supervisor y percibir un salario en la SEG, donde también el señor Alvarado Arroyo fue secretario de esta dependencia, la pregunta es ¿quién protege a este sinvergüenza y aviador que se está enriqueciendo ilícitamente en detrimento del patrimonio de dichas instituciones? ¿Por qué permitir que se sigan saqueando las instituciones de gobierno por personas que cobran un salario sin prestar sus servicios? ¿Quién está atrás de todo esto?, la respuesta es muy fácil Fermín Alvarado Arroyo, quien ahor acomo recompensa a su “buen desempeño”, durante el periodo que estuvo al frente de la paramunicipal fue nombrado magistrado presidente de la sala familiar del Tribunal Superior de Justicia.

Asimismo, se argumenta en la carta que el señor Alvarado Arroyo no tenía familiares en CAPAMA, yo le pregunto al señor magistrado ¿qué acaso María Elena Salmeron no es su cuñada, hermana de su esposa? ¿Qué acaso Francisco Javier Alvarrado Arroyo no es su hermano? ¿Qué acaso el señor Vicente Arroyo Vázquez, Antonio Miranda Alvarado y Consuelo Arroyo Vázquez no son sus tíos? quienes estuvieron cobrando en CAPAMA y les expidió nombramiento sin laborar y que alguno de ellos trabajaron en el Cobach, como es el caso de su hermano Franciso Javier y Claudia, donde el hoy flamante magistrado fue director, o sea, que toda la familia ha sido beneficiada en los cargos que ha ocupado e independientemente de cobrar jugosas ganancias, de ello se tienen las pruebas contundentes, si no basta ver los expedientes laborales 923/2000, 810/2000, 67/1996, 45/1996, entre otros promovidos ante los tribunales laborales. Por último señalo que no soy hemano del presidente electo Alberto López Rosas.

 Atentamente
Lic. Noel Rosas González