Rosario Herrera

¿Urge el préstamo?

 El día miércoles 16 de octubre aparece una nota en el periódico El Sur donde el gobernador solicita al Congreso del Estado, a través del secretario de Gobierno, Marcelino Miranda Añorve, autorización para solicitar la emisión de certificados de participación ordinaria con un valor de cien pesos cada uno, en un equivalente de mil quinientos millones de pesos de deuda en la Bolsa Mexicana de Valores, con la finalidad de pagar la deuda pública directa.

Hace menos de 40 días, el gobernador del estado, René Juárez Cisneros anduvo por varios municipios de la entidad muy activo –en pleno proceso electoral–, entregando recursos a diestra y siniestra, éstos fueron desde cheques, despensas, láminas de cartón, madera, hasta bicicletas, y su argumento principal fue que él veía por las necesidades de la gente.

La pregunta es, si no teníamos dinero ¿Por qué invirtió en estás dádivas? ¿Cuánto invirtió? Y ¿De qué partidas presupuestales tomó estos recursos?

De acuerdo a Sergio Aguayo Quezada, la deuda estatal, en junio del 2001 estaba en $1, 579,100, y si bien es cierto que el Ejecutivo estatal ha declarado que su gobierno a la fecha no ha solicitado ningún préstamo, también es cierto que apenas se ha logrado ir pagando los intereses moratorios de este asunto, y se deduce que no ha habido ningún pago directo, ni mucho, ni poco, que amortice la deuda.

Con un mayor análisis, quizá de los economistas, podríamos tener mayores argumentos sobre la pertinencia o no de endrogarnos, la idea no parece tan descabellada siempre y cuando no nos genere mayores intereses moratorios.

Pero los diputados del Congreso local, deben de solicitarle al gobernador, primero que nos informe a cuánto ascendieron los recursos que gastó hace varios días. No se trata de borrón y cuenta nueva. Los ciudadanos merecemos respeto y está obligado a darnos una explicación de los gastos que ocasionaron sus operativos electorales que personalmente llevó a cabo.

A sólo 30 días de que tome protesta la próxima legislatura con mayoría opositora, Juárez Cisneros con esta solicitud, envía un mensaje de ansiedad a los guerrerenses, de que está urgido de que los diputados locales con mayoría priísta le aprueben su petición. Es probable que lo logre porque hasta en este momento no existe una verdadera división de poderes, y la mayoría del Congreso invariablemente le han aprobado a los gobernadores en turno todas sus peticiones. Hasta este instante no ha habido constancia alguna de que haya sucedido lo contrario.

Este escenario podría traerles peores consecuencias al Partido Revolucionario Institucional por varias razones: la deuda es producto de malas administraciones de gobernadores de extracción priísta; el primer mandatario no está pensando en cómo administrar mejor los recursos para ir pagando la deuda con recursos propios a través de un plan emergente de ahorro, como él dice: a la mitad del camino, la ciudadanía en la entidad demanda cada vez más transparencia en el manejo de los recursos y no perdona en el momento de emitir su voto.

Los diputados electos que sumados tienen la mayoría opositora, tienen en sus manos el destino de nuestro estado y están llamados a cumplir y hacer cumplir las leyes vigentes y el principio republicano, independientemente de cuales sean los resultados de la solicitud del gobernador están obligados a retomar el tema para el debate, la gente va a estar muy pendiente del papel que juegue cada uno de los legisladores representantes de los distintos partidos políticos. Para poder lograr un mayor desarrollo de la cultura democrática se requiere que ellos actúen con rectitud y sin discrecionalidad alguna por el bien de todas y todos.El tiempo no perdona y los hombres y las mujeres guerrerenses tampoco, la prueba está con los resultados de la última elección. [email protected].