Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Se movilizan más de tres mil del PRD en Teloloapan

  * Participan autoridades, dirigentes y alcaldes y diputados electos * Ambiente de tranquilidad, por la presencia de los agentes de la PFP *También llegaron 15 patrullas de la Policía Estatal y agentes de la Judicial del Estado

 Eduardo Albarrán Orozco, corresponsal, Teloloapan * Con la presencia de agentes de las Fuerzas Especiales de Apoyo de la Policía Federal Preventiva, de Seguridad Pública del Estado y de la Policía Judicial de la entidad, unos 3 mil perredistas llevaron a cabo en esta cabecera municipal una marcha y un mitin en la explanada municipal Eutimio Pinzón.

A las 9 de la mañana comenzaron a hacerse los preparativos para que los distintos contingentes de las comunidades llegaran a la Y, de donde partirían en marcha hacia el Zócalo de la cabecera del municipio que ha sido gobernado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) en 4 periodos consecutivos.

Alcaldes y diputados electos estuvieron en este acto convocado por la dirigencia nacional del PRD para respaldar el triunfo de Modesto Brito González en la elección de presidente municipal, y para demandar a los gobiernos estatal y federal la aplicación de la ley a Pedro Pablo Urióstegui Salgado, quien se ha dedicado a provocar conflictos en este municipio mayoritariamente perredista.

La marcha partiría hacia el Zócalo a las 11 de la mañana, según la convocatoria. Sin embargo, eran las 12:30 horas y no llegaba la presidenta del CEN del PRD, Rosario Robles Berlanga. La gente no desesperaba. Alegres, los asistentes coreaban consignas de triunfo, y ondeaban banderines y mantas del PRD. La ciudad se vistió de amarillo y de negro.

Hombres, mujeres y niños de todas edades vestían playeras y gorras amarillas; algunas eran de promoción de campañas anteriores y estaban desgastadas, pero eso no importaba más que el color y el logotipo.

Entre los asistentes estaban Martín Mora Aguirre, presidente del CEE del PRD en Guerrero; Guadalupe Eguiluz, alcaldesa electa de Tlalchapa; los diputados electos David Jiménez Rumbo, Rómulo Reza Hurtado, Mauro García Medina, Rodolfo Tapia Bello y Virginia Navarro Avila; así como Alberto Ramírez Suárez, Arturo Hernández Cardona y Hermilo Mejía Estrada, ex presidente municipal de Buenavista de Cuéllar y actual secretario general del PRD estatal.

También se encontraban los alcaldes electos Genaro Vázquez Solís, de San Luis Acatlán; Lorenzo Arriaga Báez, de Xochihuehuetlán, y Oscar Bonilla Pérez, de Copala.

Fueron notorias las ausencias de los alcaldes electos Lázaro Mazón Alonso, de Iguala, y Alberto López Rosas, de Acapulco, de quienes se supo estaban en Morelos para dar una plática a perredistas de ese estado acerca de sus experiencias para ganar las alcaldías.

Pero se encontraban algunos presidentes de comités municipales del PRD, como Valentín Guzmán Soto, de Teloloapan, quien recientemente fue liberado después de permanecer unos 9 meses en la cárcel de Iguala por presuntos delitos electorales; Fernando Durán Chávez, de Iguala, y Francisco Gutiérrez Ramírez, de Chilapa.

También asistieron Pioquinto Damián Huato, ex aspirante a la candidatura por la alcaldía de Chilpancingo; Ramón Sosamontes, del CEN del PRD; Ubaldo Salgado, actual presidente municipal de Teloloapan, y varios dirigentes de municipios de esta región.

Se supo que durante la madrugada se logró que la Secretaría de Gobernación federal decidiera enviar agentes de la Policía Federal Preventiva para resguardar el acto en vista de las pasadas acciones de Pedro Pablo Urióstegui Salgado. Eran unos 400 y se apostaron en diversas partes de la ciudad.

También llegaron 15 patrullas de la Policía Estatal y agentes de la Policía Judicial del Estado, que se dedicaron a hacer recorridos por las principales calles de la ciudad con el mismo objetivo.

La marcha

Rosario Robles llegó poco después de las 13 horas, acompañada por Martí Batres Guadarrama, coordinador de la fracción parlamentaria perredista federal; por el alcalde electo Modesto Brito González, y por varios integrantes del CEN, que llegaron en dos camiones del PRD. Ella en una Suburban.

El recorrido transcurrió entre consignas. La gente trataba de estar cerca de sus ex candidatos y de sus dirigentes. No hubo problemas, salvo que poco antes de que llegara Rosario Robles, una grua particular al servicio del municipio se llevó una  camioneta porque estaba “mal estacionada”, y trataba de remolcar otra cuando los perredistas se dieron cuenta y reclamaron a los empleados, quienes asustados decidieron dejar el segundo vehículo y se comprometieron a devolver el que ya se habían llevado. Hubo tensión pero no pasó a mayores.

Durante el recorrido hacia el Zócalo, de algunos balcones y ventanas la gente lanzaba confeti y aplaudía al paso de Brito González y de la dirigencia nacional del PRD. También los hubo que cerraron sus ventanas.

Unas dos mil personas marcharon hacia el Zócalo, donde había poco más de mil que esperaban a los marchistas, al alcalde electo y a los dirigentes municipales, estatales y nacionales del PRD.

Durante el acto, en los alrededores de la plaza, agentes de la Policía Federal Preventiva custodiaban el mitin. Toda persona que transitaba era escudriñada por los ojos de los hombres vestidos de gris y equipados con armas largas.

Por el mercado, cerca del atrio de la iglesia, en las calles aledañas, cerca del local del PRD y a unas calles de la casa de Pedro Pablo Urióstegui, había otros agentes de la PFP. También los había de civil, con tan sólo una gorra y sus cámaras fotográficas y de video. Eran los de Comunicación Social de la corporación policiaca federal.Los de la PJE no eran bien  vistos por la gente. Los de la Policía del Estado vestían chalecos antibalas, armas de alto poder, cascos, toletes y escudos.La presencia de la PFP no molestó a la gente. Por el contrario, se percibía un ambiente de cierta confianza. Tanto, que mientras Rosario Robles daba su mensaje, un niño de cuando muchos 5 años corría por la explanada con una bandera de México, mientras la gente escuchaba, comía paletas o tomaba agua fresca para mitigar el calor.

468 ad