No fue un ultimátum, mucho menos al presidente Fox, dice Juárez Cisneros

 * Por encima de cualquier interés de grupo, así sea de gobernadores, está el interés supremo de la nación, arguye

 Ossiel Pacheco * El gobernador René Juárez Cisneros, luego de inaugurar ayer en Acapulco la 33 Convención Nacional de Valuadores, dijo que el acuerdo adoptado por la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) –de no asistir a una reunión con Vicente Fox el lunes, en caso de que antes no haya respuesta a su demanda de entrega de recursos– “no es un ultimátum, mucho menos al presidente de la República”.

Afirmó, sin embargo, que el ajuste presupuestal de la federación, que asciende a mil millones de pesos, equivalentes a 11 por ciento de las participaciones del Ramo 28 que llegan a la entidad, “es sumamente lesivo” para Guerrero.

Un día antes, el Ejecutivo estatal participó en Metepec, estado de México, en la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), que demandó que el gobierno federal restituya más de 40 mil millones de pesos que fueron recortados a los estados del presupuesto de 2002.

En el acto inaugural de ayer, al que asistió el alcalde Zeferino Torreblanca Galindo, Juárez Cisneros dijo que más allá del ajuste presupuestal y de los problemas de Guerrero, está México; “quiero dejar claro que por encima de cualquier interés partidario, de grupo o de cualquier confederación, sea ésta de gobernadores o de cualquier otra índole, ésta el interés supremo del país”.

Confió en que en el gobierno de la República en estos días habrá de dar una respuesta a las entidades federativas dentro de sus posibilidades presupuestarias, de sus responsabilidades constitucionales y “de la realidad social que vive cada estado”.

Aclaró que los mandatarios no conformaron la Conago para enfrentar al Ejecutivo federal; “no se creó este organismo para estorbarle a Vicente Fox, quien tiene del gobernador de Guerrero todo el apoyo como presidente de la República para que pueda cumplir con su responsabilidad histórica que el pueblo le ha encomendado”.

Asentó que no será el gobierno de Guerrero, quien confronte irracionalmente al gobierno de la República, porque, a fin de cuentas, “el país lo constituimos todos, la federación somos todos; el compromiso no excluye a nadie”. Dijo que como gobernador tiene la responsabilidad de velar por los intereses de Guerrero, “en un marco de respeto, en un marco estricto de civilidad”.

En su discurso inaugural ante los 300 congresistas asistentes a la 33 Convención Nacional de Valuadores, el gobernador aprovechó para fijar lo anterior como la posición del gobierno de Guerrero en torno al “gran acuerdo” que todos los actores del país tienen que construir para que México avance.

Hay estabilidad política en Guerrero

También destacó que al finalizar el proceso electoral el estado está en paz. “Hoy tenemos en Guerrero, como nunca, un flujo de inversión privada creciente en diferentes ramas de la actividad económica de la entidad”, dijo.

“Hoy en Guerrero, tenemos estabilidad política, tenemos confianza y certeza jurídica para impulsar la inversión productiva que genera empleos. Afortunadamente en los tres años y medio que tengo al frente del gobierno hemos podido mantener la cohesión social, la tranquilidad, la paz y la armonía, que hoy son garantes del desarrollo”, agregó.

Expresó que quedaron atrás los escenarios de confrontación, de incivilidad y de desencuentros, “y eso para nosotros es fundamental; quizás en otros estados de la República, del norte o en el centro, el elemento armonía y paz no es, quizás, el factor fundamental, pero en Guerrero sí lo es”.

El mandatario estatal compartió el presidium con el alcalde porteño, así como con el presidente de la Federación de Colegios, Institutos y Sociedades de Valuadores de la República Mexicana (Fecival-Covamex), Fidel Alvarez González, y el coordinador general del encuentro, Marco Antonio Hernández Ramírez.

En entrevista al término del acto inaugural, Juárez Cisneros informó de la reunión que sostuvieron los gobernadores que integran la Conago con el titular de la SHCP, Francisco Gil Díaz, el miércoles pasado, en la que pidieron entregar los recursos que han sido descontados, sobre todo del rubro de las participaciones federales a los estados.

Consideró que la demanda de los gobernadores “es una petición justa; en todo caso, esperaríamos una respuesta en bien del país”. Luego matizó: “Esta confederación se creó con el propósito de contribuir, de coordinar esfuerzos con el presidente de la República a favor de la nación, y lo que tratamos es resolver los problemas de México”.

Indicó que la cuestión presupuestal discutida en la reunión con Gil Díaz es un asunto de gobernabilidad y de interés nacional, porque lo enfrentan todas las entidades federativas. Pero, en el caso de los estados del sur, “es un asunto más delicado, porque la incapacidad de resolver las demandas sociales provoca inconformidad”.Dijo que los recortes obedecen a que las estimaciones que hizo la SHCP el año pasado sobre la recaudación tributaria para 2002 no se cumplieron, y “nosotros tenemos problemas presupuestales muy serios en el estado”.René Juárez negó que la Conago diera un ultimátum al gobierno de Fox Quesada: “los gobernadores no estamos poniendo un ultimátum a nadie, mucho menos al presidente de la República, estamos diciendo que quisiéramos tener una definición previa a la reunión del lunes para discutir el presupuesto de 2003, pero antes debemos agotar el 2002”.Rechazó que la reunión de la Conago signifique un rompimiento con el mandatario federal, aunque sí dejo en claro que los gobernadores piden más potestades recaudatorias para que los estados recauden, pues “no tenemos responsabilidad recaudatoria, y estamos sujetos a las decisiones burocráticas”.