El atropellamiento fue planeado como un atentado de Estado: Tadeco

El homicidio de la joven guerrerense, Aurora Tecoluapa Tecoapa, y las lesiones a seis de sus compañeras de la Normal Rural Emiliano Zapata, en Morelos, fue un atentado del Estado mexicano, planeado con alevosía y ventaja para crear terror en la población, reprimir y contener la organización popular, como lo ha hecho en otras ocasiones, señalaron el Taller de Desarrollo Comunitario (Tadeco), el Frente Nacional de Lucha por el Socialismo, Red Nacional en Defensa de los Derechos Humanos y la Red de Defensa de los Derechos Humanos.
“No admitimos que se trate de un accidente, sino de un atentado en contra del normalismo rural y en general es una forma en que el Estado mexicano pretende eximirse de su responsabilidad, de garantizar el derecho humano a la protesta, así como de evitar resolver las exigencias del movimiento estudiantil-popular, al tiempo que crea miedo, pánico y terror en la población, para contener la organización popular”, afirmaron, y exigieron justicia y castigo a los responsables materiales e intelectuales.
En un comunicado, condenaron que el movimiento estudiantil-popular vuelva a ser víctima de atentados, reprocharon que no puede considerarse un accidente, porque “un agente solitario” cometió el homicidio al embestir a las estudiantes, nunca redujo la velocidad, se fugó y fue imposible identificarlo, lo que demuestra que fue “un acto con alevosía y ventaja de utilizar un automóvil como arma”.
“El Estado mexicano, como parte de su estrategia policiaco-militar, no solamente legaliza el uso de la violencia, sino además ha puesto en marcha a agentes que como particulares o paramilitares también atentan contra los esfuerzos organizativos del pueblo mexicano. Sin duda alguna, estas medidas represivas son la antesala de la profundización de las medidas pro fascistas, que el gobierno en turno pretende imponer para garantizar las inversiones de la oligarquía”, consideraron.
Destacaron que las normalistas de Amilcingo han mantenido una lucha permanente para evitar que sea clausurada la escuela, un referente nacional que ha acompañado a los campesinos en su lucha contra la imposición del Proyecto Integral Morelos, en Morelos, Puebla y Tlaxcala.
Insistieron en que el gobierno pretende justificar que estos actos criminales son hechos porparticulares, como en otros atentados, que “se han vuelto recurrentes” en los movimientos populares.
Recordaron que en enero un tráiler atentó contra normalistas que boteaban en la carretera Atoyac-Coyuca de Benítez, donde murieron dos estudiantes; el 9 de abril un “supuesto taquero utilizó su camioneta como arma”, hirió a 12 normalistas y representantes de organizaciones sociales en Mi-choacán.
Y en junio pasado siete maestros de la CNTE fueron asesinados, porque a un tractocamión “le fallaron los frenos” en el mismo estado, en el contexto de las movilizaciones contra las reformas educativa y laboral. (Redacción).