No dejará deudas mi gobierno; los 50 millones no se usaron, refuta Zeferino

  * El adeudo con las constructoras se pagará con las ministraciones que no ha entregado el gobierno del estado, insiste

 Ossiel Pacheco * El alcalde Zeferino Torreblanca Galindo, al refutar al secretario de Finanzas y Administración del gobierno del estado, Rafael Acevedo Andrade, informó que el ayuntamiento de Acapulco, con autorización del Congreso local, abrió con el Banco Nacional de Obras (Banobras) una línea de crédito por 50 millones de pesos, que no fueron utilizados.Entrevistado la mañana de ayer al término del acto inaugural del congreso internacional de la Federación Internacional de Ingenieros Constructores, Torreblanca Galindo explicó que la idea de solicitar una línea de crédito a Banobras por 50 millones de pesos fue para evitar que en el último año de gobierno, que es de 11 meses, se retrasara la entrega de las obras.

Dijo que no deja endeudado el ayuntamiento, pues aunque se adeuda a constructoras obras, que llevan un avance del 90 por ciento, sólo se ha ejercido 80 por ciento de los recursos federales que a la fecha le han sido entregados.

Aseguró que esos adeudos serán cubiertos con el flujo de efectivo del Fondo de Infraestructura Social Municipal del Ramo 33 que el gobierno del estado adeuda al municipio, correspondiente a las ministraciones de septiembre y octubre.

“Tenemos un cuello de botella, dada la velocidad que llevamos en las obras, porque llevamos más obras que dinero recibido. Por ello se pidió una línea de crédito de 50 millones de pesos con Banobras, que pensamos utilizar en un principio, pero después decidimos que no era necesario”, detalló.

Contundente, afirmó que el municipio de Acapulco está ubicado entre los 30 ayuntamientos del país con más alta calificación, según la consultora internacional Standars and Poors, por no tener deudas y sí tener capacidad de pago.

Indicó que el ayuntamiento solicitó al Congreso del Estado su autorización para abrir la línea de crédito en Banobras, aun cuando “creemos que es innecesario pedir autorización al Congreso para solicitar la apertura de líneas de créditos, pues el municipio tiene capacidad financiera para responder por sí solo”.

Adelantó que después de las elecciones del 6 de octubre, una vez terminada la ebullición política y social que vive el pueblo de Acapulco, dará a conocer a la opinión pública los libros blancos del estado en que se encuentra la administración que dejará a su sucesor.

Dijo que aún no recibe la administración del anterior gobierno municipal, pues es la fecha en que no han llevado a cabo la entrega-recepción, aun cuando ha solicitado por escrito a la Contaduría Mayor de Hacienda del Congreso local los documentos correspondientes.

De nueva cuenta, el alcalde porteño recordó que al asumir el cargo el 1 de diciembre de 1999 encontró que el municipio adeudaba 90 millones de pesos, y sólo podían disponer de 600 mil pesos en una cuenta de cheques, “no había ni para pagar salarios, ni cubrir el aguinaldo de los trabajadores”.En cuanto al estado que guarda su relación con el Ejecutivo estatal, dijo que la gente entiende que hay la suficiente madurez entre ambos, “entendemos que los tiempos (electorales) aceleran los señalamientos, que se cae en descalificaciones”.Sin embargo, apeló a que después del 6 de octubre, una vez que las autoridades correspondientes determinen al ganador, “nos integremos a la vida productiva del municipio; estoy seguro que así va a ser”.