Tres cierres distritales como mandan los cánones priístas

 Ricardo Castilo Díaz * En lo que parece un reflejo del ánimo que hay en el PRI, César Bajos Valverde mira al cielo y agradece: “Hasta Dios se apiadó de nosotros. Auguraban tormentas pero diosito nos ayudó”.

No lo dice en corto. Es su discurso de cierre de campaña en Costa Azul, una plaza clasemediera que desde hace mucho dejó de ser para el PRI. Los priístas aplauden la invocación.

El candidato a diputado local del distrito 26 por la Alianza para Todos da un mensaje breve para ceder los reflectores al aspirante a alcalde Ernesto Rodríguez Escalona. “Yo fui a buscar a César para pedirle que renunciara a la Secretaría de Desarrollo Económico donde estaba haciendo un excelente papel, y aceptara ser candidato a diputado en este distrito”, confiesa Rodríguez Escalona ante el suplente de Bajos, el regidor René Morales Barrientos, quien aspiró a la candidatura hasta que los siete candidatos oficiales de los distritos del puerto fueron presentados por spots de televisión.

“Claro, sin saber en ese momento que él iba a ganar la candidatura”, se apura a precisar el candidato a alcalde del tricolor.El del cierre del distrito 26 es un pequeño templete en el que apenas caben quienes lo llenan. No hay dirigentes nacionales ni gobernadores del PRI, los de las grandes ligas de la política priísta que apenas se dan descanso entre que se deslindan del escándalo del Pemexgate y defienden a uno de los suyos involucrado, el diputado Carlos Romero Deschamps.“Hicimos el cierre en Costa Azul, porque aquí donde estamos está mi sección electoral; ya hicimos el arranque en una colonia pobre, allá en la huerta Santa Elena”, explica César Bajos como parte de su discurso.

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El animador de bares y pozolerías Charly Buenrostro tiene que interrumpir su actuación en Llano Largo porque Rodríguez Escalona ya viene hacia el lugar del mitin, una cancha repleta en la que caben las poco más de mil personas que fueron llevadas a ese sitio del distrito 18, que incluye el municipio de San Marcos. Algunos son comerciantes que provienen del Mercado Central del puerto, hasta donde los recogieron los autobuses.Arturo Salinas Sandoval, director de Gobernación municipal cuando Manuel Añorve fue alcalde, viene con su radio a la cintura y coordina la llegada de los que subirán a la tarima. “Se va a caer el templete”, advierte un hombre de altavoz sin que alguien lo escuche.Diez minutos dedican Rodríguez Escalona y el candidato a diputado, el añorvista José Luis Avila a levantar los brazos en señal de triunfo, a bailar y a corear la canción de la Alianza para Todos que se escucha a todo volumen. Es un remix discotequero con una voz parecida a la de Andrea Bocceli, que dice que “juntos somos más”.

El comisario de Llano Largo Germán Adame da un brevísimo discurso de una sola frase: “Amigo Rodríguez Escalona,

seas bienvenido a este pueblo tuyo priísta en el que siempre hemos ganado y vamos a volver a ganar. Muchas gracias”.

Patricia Astudillo, dirigente de las mujeres del PRI en el puerto y candidata a regidora en la planilla rodriguezescalonista toma la palabra para puros elogios. Se lleva la mitad de su tiempo en mencionar “la presencia de nuestro amigo Héctor Astudillo Flores, de nuestro amigo Jesús Bernal Román, de nuestro amigo Manuel Añorve Baños, de nuestro amigo Humberto Salgado Gómez, de nuestro amigo Oscar Rangel, de nuestro amigo…”.Como mandan los cánones priístas, no desaprovecha su oportunidad para referirse a René Juárez Cisneros de quien dice: “nuestro gobernador ha sido valiente, es un gobernador que siempre ha estado al pendiente de nosotros ¡arriba nuestro gobernador!”.El regidor Rodolfo Balbuena Naves, dirigente sindical cetemista, anuncia que el día de la elección “los que entran a las 9 de la mañana podrán entrar a las 10 para ir a votar, o se podrán tomar otra hora, pero hay que llevar a la gente a votar”.

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 Dalia Serna escucha a El Bronco y su banda en el Rodeo de noche del crucero de El Cayaco, mientras comienza el cierre de campaña de Rodríguez Escalona y el candidato a diputado del distrito 28, César Flores Maldonado.Ya va más de una hora de retraso y muchos de los mil 500 que asisten comienzan la retirada. “No dan las chelas, ya vámonos”, reclama uno de los que se va.Una larga valla por fin conduce a Rodríguez Escalona y a Flores Maldonado hacia los micrófonos que ocupaba la banda, frente al ruedo donde el jaripeo se da una pausa.“Es tiempo de volver a ganar”, dice César Flores antes de agradecer a los líderes que participaron en su campaña, a quienes menciona uno por uno.Ante el candidato a diputado, ex precandidato a alcalde del PRI, Rodríguez Escalona recuerda que “hace tres años no logramos la unidad, pero ahora se nota que estamos unidos, en el ambiente se respira que podemos recuperar Acapulco”.El rodeo se cimbra. Es el remix de la Alianza, que ya debe dar paso a la música de banda. Bajo el ritmo tecno se escucha una voz en off de Rodríguez Escalona con un efecto al que los discjoker llaman scratch: “No es justo, simplemente no es jus… simplemente no es justo… El problema del agua tiene solu… tiene solución… Se pudo haber hecho algo, pero no se hi… pero no se hi… pero no se hizo. ”.“¿Dónde están dando los tacos de César?”, pregunta una niña de Renacimiento, que en medio de esta música como del Baby’O ya se mueve en estos trotes del tricolor.