Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Festiva marcha de 20 mil ciudadanos en el cierre de campaña de López Rosas

 Nelly Bello * Festivo y desbordado avanzó el contingente de 20 mil perredistas que acompañaron al candidato a presidente municipal, Alberto López Rosas, de la avenida Cuauhtémoc hasta el Zócalo, al cierre simbólico de una campaña que seguirá hasta pasado mañana miércoles.

El jefe de Gobierno del DF, Andrés Manuel López Obrador, midió fuerzas y arrasó en simpatías porteñas al que podría ser su contendiente por la Presidencia de la República en el 2006, el gobernador de Zacatecas, Ricardo Monreal Avila; los perredistas reconocían a López Obrador con gritos como “el futuro presidente” y no perdían oportunidad de tomarse la foto con él o de pedirle su firma en la camiseta o la cachucha.

Igual le fue al alcalde Zeferino Torreblanca Galindo, en relación con el diputado federal Félix Salgado Macedonio, pues aunque el segundo fue aclamado por los perredistas, también lo fue el presidente municipal, pero a éste le llamaron “futuro gobernador”.

El mitin fue comparado por algunos con la marcha de fines de julio de 1988 en protesta por el fraude priísta contra el candidato a presidente de la República Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, en el que se congregaron unos 30 mil guerrerenses, según crónicas periodísticas de la época. Y es que los perredistas no olvidan que hace tres años con Zeferino Torreblanca estaban el PAN y el PT, y por eso algunos sintieron el cierre de López Rosas como el reencuentro de la identidad perredista.

El punto de reunión fue rebasado, pues en lugar de comenzar en La Piñata del parque Papagayo, la marcha empezó en la esquina de la tienda Gigante, tres cuadras más adelante. Partió 15 minutos antes de lo programado con la llegada de López Rosas y los gobernadores Andrés Manuel López Obrador, del DF; Lázaro Cárdenas Batel, de Michoacán, y Ricardo Monreal Avila, de Zacatecas, así como la dirigente nacional, Rosario Robles Berlanga.

Ya los esperaba el diputado federal David Sotelo Rosas, y también se unieron en puntos distintos los diputados federales Félix Salgado Macedonio y Martí Batres Guadarrama, así como el alcalde Zeferino Torreblanca Galindo, quien se incorporó con varios frenteciviquistas antes de la vía rápida.

Desde la salida del grupo, quien vigiló la operación montada por Tránsito fue el encargado de despacho de la Secretaría de Protección y Vialidad (SPV), Leonel Villalobos, a bordo de la patrulla 615.

No sólo la alegría estaba desbordada, también el grupo, pues envolvió a sus líderes, que de ese modo no encabezaron el contingente. Conforme avanzaban por la avenida Cuauhtémoc se unían simpatizantes de López Rosas y que además apoyan a alguno de los candidatos a diputado local.

De una de las casas en la avenida se asomó el regidor panista Rubén Camacho, que saludó de lejos a algunos perredistas conocidos.

Avanzaron rápido, el ritmo del paso lo marcó la alegría de llegar al Zócalo, donde tendrían la fiesta cívica, como llamaron al mitin. Ya en el templete, como cadeneros de discoteca, los encargados de la seguridad no pudieron impedir que algunos simpatizantes que buscaban la foto al lado de los líderes nacionales, subieran. No los amedrentó el crujir de las tablas que amenazaban con colapsarse, y renegaban para bajar, y los bajaban no tardaban en volver a subir por otros sitios.

López Rosas, López Obrador, Monreal, Lázaro Cárdenas, Rosario Robles y Zeferino Torreblanca fijaron sus discursos en la salida del PRI de los gobiernos municipales y en quitarle la mayoría en el Congreso del Estado.

Al acto no asistió el senador Armando Chavarría Barrera, quien estuvo comisionado en la Costa Chica, pero tampoco su asiduo acompañante, el presidente del Comité Ejecutivo Estatal, Martín Mora Aguirre.Cuando finalizaron los discursos, un candidato a regidor comentó: “Dios es perredista”, pues aunque estaban anunciadas lluvias dispersas, el clima fue agradable con ráfagas refrescantes de viento.Los líderes fueron despedidos con un reggae pegajoso que invita a votar por López Rosas; casi todos se fueron, sólo quedó en el templete el alcalde, que lo mismo firmaba camisetas y gorras, que bailaba cadencioso con las candidatas a diputada local Yolanda Villaseñor, del distrito 28, y Gloria Sierra, del distrito 26.

468 ad