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Marchan transportistas que laboran con permiso de SCT en Tierra Caliente

* Denuncian la detención ilegal de sus vehículos

GregorioUrieta, corresponsal, Ciudad Altamirano * Miembros de la empresa Transportistas Unidos de la Tierra Caliente, A.C., que trabajan con permisos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes  prestando el servicio de transporte foráneo en diversas rutas de la región, realizaron una marcha par exigir la destitución del delegado de transportes en la región, Luis Pérez Mariano, a quien califican de agitador, ya que ha estado organizando operaciones para detener y retener las unidades de transporte de esa empresa filial de la Confederación Nacional Campesina, apoyado por choferes de las rutas de transporte local y suburbano, en acciones que han estado a punto de terminar en enfrentamientos físicos.

La marcha, encabezada por el dirigente de la organización, Valentín Cornejo, partió de las instalaciones de la Distribuidora Cocacola y llegó hasta el centro de esta población, de donde fueron al ayuntamiento y de ahí a su base, que está a un costado de la avenida Lázaro Cárdenas.

Los manifestantes marcharon a bordo de 22 unidades Urvan, portando pancartas y mantas con leyendas como “próximamente Tierra Caliente cementerio de luchadores sociales y caciques”, “El Bocho nombró al Güicho, razón de prepotencia y abuso”, “Fuera fueros del Bocho”, “No más cierres de carreteras promovidos por el Bocho”, “Toda la sociedad unida para evitar que ocupen puestos públicos los Bochos y Guichos”, “Destitución inmediata  del Güicho”, “Autoridad ciega, sorda y cómplice”, entre otras leyendas pintadas en las Urvan.

Entrevistado en las oficinas de la base, Valentín Cornejo manifestó que los socios de la organización no están dispuestos a soportar una detención más y que “ya están pensando mal”. De esa manera justificó la leyenda de la manta que reza “próximamente Tierra Caliente cementerio de luchadores sociales y caciques”.

Añadió que los socios están a punto de irse a la quiebra, pues no los dejan trabajar y están pagando unidades Urvan nuevas a un costo de 305 mil pesos y pagando mensualidades de 9 mil 800 pesos.

“Están desesperados y no será Valentín Cornejo, serán todos los socios lo que tomen en sus manos la decisión de ya no tolerar que nos quiten nuestras unidades y que nos dejen trabajar. Yo como dirigente no quiero cargar con ninguna responsabilidad. La gente no se va a controlar. Responsabilizamos a Luis Pérez Mariano y a la familia Soto Duarte de lo que pudiera pasar, porque ya no vamos a dejar. Las autoridades no ven ni oyen el conflicto que se nos viene encima”, advirtió Valentín Cornejo, a cuya organización el delegado de Transportes, apoyando por la policía municipal de Coyuca de Catalán y por choferes de la ruta Coyuca Altamirano, le quitaron y retuvieron seis Urvan el pasado 13 de agosto.

Esas unidades apenas les fueron devueltas este 13 de septiembre. En aquella ocasión un transportista llamado Manuel Rosado, de la ruta de Coyuca, golpeó a Cornejo y al tesorero de la organización, ante la pasividad de la policía municipal de Coyuca, que acudió a apoyar el operativo, a solicitud de Luis Pérez Mariano.

Valentín Cornejo explica que cuentan con permisos de la federación expedidos por la SCT y que hasta el momento no existe ninguna orden de supervisión ni de retención de unidades, ya que desde el año pasado están en un proceso de reordenamiento y cambio de unidades, y que el miércoles de la semana pasada, el subdirector de Transporte de la SCT en la entidad, Fortunato Ayala, le informó al director de la Comisión Técnica del Autotransporte Urbano, Reynaldo Echeverría, que no existía ningún impedimento para que la empresa de Valentín Cornejo pudiera prestar el servicio en las rutas que lo hace. El mismo funcionario invitó a Echeverría a una reunión con ese objeto a la ciudad de México, pero no asistió, asegura Cornejo.

Los chicos súperpoderosos

El conflicto por las rutas ha llevado a la misma situación a aquellos que están agrupados en El Barzón, que anteriormente pertenecieron a Transportistas Unidos .

A fines de agosto los hermanos Octavio –conocido como El Terremoto– y Abraham Soto Duarte, apoyados por la policía de Pungarabato, en una operación que coordinó directamente, aunque oculto, el alcalde Angel Pérez Navarro y Luis Pérez Mariano detuvieron una Urvan en las inmediaciones de la Sagarpa.

Hasta ahí llegaron los barzonistas, quienes se enfrentaron a los Soto Duarte, los que profirieron amenazas de muerte en contra de Edilberto Espinosa Baldovinos, el ex dirigente del PRD municipal Manuel Santamaría y otros barzonistas.

Después de que se publicó el hecho en este medio, los hermanos Soto fueron a ver a Espinosa Baldovinos. Le pidieron que sacara las Urvan con permisos federales y ellos se comprometerían a entregarle permisos estatales. “Ahorita nosotros podemos sacar los que queremos, pero ya párale”, le dijeron a Espinosa Baldovinos, según comentó este al corresponsal.

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