Piden diálogo con los poderes de la Unión para cambiar la ley indígena

 * En un documento leído por un representante del Consejo Guerrerense 500 Años, invitan al gobierno a dejar la cerrazón política y a crear un nuevo modelo de Estado incluyente y respetuoso de la diversidad * Advierten que no están dispuestos a permitir la imposición de modelos culturales, políticos y jurídicos ajenos

 Zacarías Cervantes, corresponsal, Chilpancingo * Organizaciones indígenas de 13 estados del país participaron ayer en el Encuentro Nacional de Pueblos y Organizaciones Indígenas, en el que, a una semana de que la suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declaró improcedentes las controversias constitucionales en contra de la ley de derechos y cultura indígena, se hicieron pronunciamientos por “acciones radicales” en contra de dicha ley y no fueron bienvenidos el director del INI, Huberto Aldaz Hernández, así como el ex titular de la dependencia federal, Marcos Matías Alonso.El encuentro se desarrolló en el auditorio Eduardo Neri de la Unidad Deportiva Chilpancingo (Udech) en donde se escucharon fuertes reclamos y protestas en contra del gobierno federal y la Suprema Corte de Justicia de la Nación instancias a las que acusaron de continuar con una “guerra de exterminio” en contra de los pueblos indígenas, de negarles sus derechos, a su cultura, costumbres y hasta su territorio.

En un ambiente de resentimiento, enojo, indignación e impotencia, por el reciente revés que recibieron de parte de la SCJN al declarar improcedentes más de 320 controversias constitucionales que fueron presentadas en contra de la ley de derechos y cultura indígena que fue aprobada por el Congreso de la Unión, se reunieron aquí, xoltecas, mixes y zapotecas de Oaxaca,  purépechas de Michoacán, Croix de Veracruz, chinantecos de Oaxaca, Chiapas, Veracruz y Quintana Roo. Sus anfitriones fueron los nahuas, mixtecos, tlapanecos y amuzgos de Guerrero.En total según el registro asistieron organizaciones e indígenas de los estados de Chiapas, Oaxaca, Veracruz, Morelos, Chihuahua, Quintana Roo, Distrito Federal, Sonora, Sinaloa, Puebla, Tabasco, Michoacán y Guerrero.Llegaron con invitación, pero sin ser nombrados en la lista de asistentes, el director del Instituto Nacional Indigenista (INI), Huberto Aldaz Hernández, mixe de Oaxaca; el ex director, Marcos Matías Alonso, nahua de Guerrero, quien actualmente es el representante del Foro Permanente para los Pueblos Indígenas de la ONU, así como el director del INI en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, Guillermo Espinoza Villarreal, actual director del Instituto Indigenista Interamericano de la OEA, así como el presidente de la Comisión Legislativa de Asuntos Indígenas del Congreso de la Unión, Héctor Sánchez.

Ellos ocuparon las primeras butacas del auditorio pero no fueron invitados al presidium.

La mesa que coordinó los trabajos estuvo integrada por el indígena mixteco guerrerense Cirino Plácido Valerio, el purépecha de Michoacán Abelardo Torres Cortés, el nahua guerrerense Guillermo Alvarez Nicanor y la dirigente de la Asamblea Nacional Indígena por la Autonomía (ANIPA) y de la Coordinadora Nacional de Mujeres Indígenas, Gilda Xihu.Antes de la inauguración, en nombre del Consejo Guerrerense 500 Años de Resistencia Indígena, el dirigente Gaudencio Mejía dio lectura al documento en el que los indígenas lamentan que el evento convocado hace dos meses  –antes de conocer cual sería la resolución de la SCJN– se realice ahora “con gran decepción, pena, dolor, impotencia y coraje por la noticia del fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación al declarar improcedentes las más de 320 controversias constitucionales presentadas contra el procedimiento de aprobación de las reformas en materia de derechos y cultura indígena”.

Para los indígenas, el fallo de la SCJN no es más que “un albazo jurídico porque la actual reforma constitucional vulnera y menoscaba nuestros derechos fundamentales ya establecidos en el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT)”.Con ello, agrega en el documento leído, “el gobierno del cambio exhibe su verdadero rostro con una política neoliberal que ofrece a los indígenas una oferta nada novedosa y detrás de esta mascarada privilegiar a los derechos del capital, negando los derechos históricos de los pueblos originarios”. Advierten que el Plan Puebla Panamá (PPP) “va con todo; no duda en tratar de privatizar los recursos naturales y estratégicos, donde los pueblos indígenas se encuentran asentados”.Por ello, los indígenas invitaron “a dejar la cerrazón política exhibida por los poderes de la Unión, insistimos en el diálogo profundo de enlace nacional que nos lleve a crear un nuevo modelo de Estado incluyente y respetuoso de la diversidad, porque no estamos dispuestos a permitir la imposición de modelos culturales, políticos y jurídicos ajenos a nuestra realidad”.

Para los indígenas el mensaje hasta ahora enviado por el gobierno federal “es de un colonialismo interno, que se presenta disfrazado de modernidad; es como el lobo que cambia el pelo, pero nunca el vicio. No estamos dispuestos a aceptarlo bajo ninguna circunstancia”, advierten.Y advierten del riesgo de que los pueblos indígenas y los mexicanos en general, “tengamos nuestras leyes de desamortización, por ello, hoy más que nunca necesitamos luchar por la instauración de un Estado profundamente democrático con la participación y pleno reconocimiento de los derechos colectivos de los pueblos indígenas”.Cuando se dio la voz a los representantes de las organizaciones que vinieron de varios estados del país, hubo protestas mucho más fuertes.Una de ellas fue la del indígena de Oaxaca, Saúl Vicente, quien propuso a los aproximadamente 500 asistentes realizar “acciones radicales fuertes en el plano nacional e internacional para obligar a los tres poderes de la Unión a dar marcha atrás a la ley de derechos y cultura indígena” y entre estas acciones propuso, por ejemplo la toma del Congreso de la Unión hasta que se revise la citada ley.Pero antes llamó a un proceso de unidad a todas las organizaciones indígenas del país, porque reconoció que en algunas y entre ellas hay división.El dirigente indígena también dijo que las organizaciones deben exigir al gobierno federal programas de desarrollo integral para las regiones indígenas financiados con un presupuesto justo y no meros programas asistenciales.Demandó que la consulta que se realiza para las reformas al INI no queden ahí, sino ir más allá, por ejemplo, obligar al Congreso de la Unión a revisar la ley indígena, dijo.Julio Marcos Prado, purépecha, también lamentó que la SCJN haya declarado improcedentes las controversias constitucionales, “eso evidencia que es mentira que el gobierno federal apoye a los indígenas, los resultados demuestran que la realidad es otra”.

Criticó, asimismo, a los gobiernos estatales “democráticos” de Michoacán y Chiapas, de que no estén tomando en cuenta a los indígenas.En su intervención también hubo críticas al INI, del que dijo que no ha impulsado políticas reales para apoyar a los indígenas.Esta no fue la única alusión, hubo otra, que se refirió directamente al titular de la dependencia, Huberto Aldaz Hernández, ahí presente, cuando el representante del Consejo Indígena de Oaxaca y coordinador de la Organización Ricardo Flores Magón, Raúl García, dijo a pesar de la presencia del funcionario y su antecesor, Marcos Matías, “dudo mucho que nos escuchen”.Al inicio, en una plenaria se emitió el mensaje general, siguió otra plenaria en la que se escucharon intervenciones de los asistentes que se anotaron en la lista de oradores, mientras que por la tarde darían inicio las mesas de trabajo.Los temas son el análisis de la coyuntura actual, articulación del movimiento nacional, estrategia y tareas, la reforma constitucional y de Estado, el problema agrario nacional y el Plan Puebla Panamá.Las actividades del Encuentro Nacional de Pueblos y Organizaciones Indígenas continuarán este viernes cuando se espera que se den a conocer los acuerdos.