Reportan anomalías en evaluaciones de 45 alumnos aceptados en Medicina

Raquel Santiago Maganda * En la primera revisión de las evaluaciones de 45 de los 302 aceptados en la Facultad de Medicina, se descubrieron supuestas irregularidades, informó el director de la institución, José Alvarez Chávez.

Una de ellas –dijo– fue “por error” suyo, y explicó que le atribuyeron diez puntos más a una alumna, además de un promedio de bachillerato que no coincidió.

La revisión concluirá el sábado.

Posteriormente, José Alvarez se reunió con los padres de familia de los alumnos aceptados y con los tutores de los que no clasificaron en los 302 espacios.

En uno de los salones, el director, junto con los consejeros estudiantes explicó el proceso de evaluación a los inconformes.

Allí, el dirigente de la FEUG, Carlos Pacheco Reducindo, quien encabezó la comisión de inconformes por los resultados, representantes estudiantiles de la Unidad Académica y José Alvarez comenzaron la revisión de las listas.

Aunque la propuesta era revisar cada uno de los casos, el director sugirió que fueran escogidos al azar los número de folios, de esta manera sólo se alcanzó a revisar a 45 estudiantes.

Como resultado, se descubrió que una de las aceptadas registró 10 puntos más que lo obtenido. por lo que mientras Carlos Pacheco calificó el hecho como “una irregularidad”, el director reconoció que fue su error porque durante el vaciado de información del examen Ceneval a la base de datos se suscitó el cambio de puntuación.

Explicó que a pesar de ello la estudiante clasificaba porque su promedio se mantuvo en el margen de los aceptados, que fue mínimo de mil 812 puntos, y que hasta ayer ninguno de los inconformes podía demostrar que su puntuación estaba dentro del margen.

Otro fue que uno de los estudiantes aceptados registró 8.6 de promedio, pero en su sumatoria registró 9.2, según lista que tenían los inconformes.

Después de más de una hora, Alvarez Chávez precisó que el Consejo Universitario será el que decida si los espacios sin registrar –de los que hasta ayer no se confirmaba el número–serían ocupados por los alumnos que seguían de la lista o se cerraba el cupo.

En tanto, los padres de familia comenzaron a organizarse y propusieron una visita al rector de la UAG, Nelson Valle López, “para presionarlo y exigirle los espacios”.

Asimismo, los inconformes insistieron que si se iban a abrir espacios para los jóvenes que no se inscribieron, “entonces deberían ocuparlos nuestros hijos, porque no vamos a luchar por otros”.

Finalmente, indicaron a Carlos Pacheco que durante un receso el director les comentó que formarán una lista de los aspirantes rechazados, la cual entregarán hoy, para informarles si por sus promedios tienen la posibilidad de quedar inscritos.