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“Esto se va a poner peor”, últimas palabras del candidato asesinado

* Según el testimonio de la hija, cuatro individuos tocaron a la puerta de su casa, y cuando Ignacio Benítez les abrió, dijeron que era un asalto

Eduardo Albarrán Orozco, corresponsal, Huitzuco * Alrededor de 400 personas asistieron al cortejo fúnebre del candidato a presidente municipal por el PAN, Ignacio Benítez Abúndez, y de su esposa, Macedonia Marbán Castrejón, entre las que se encontraban Francisco Rodríguez Otero, delegado estatal de Acción Nacional, Carlos Millán Sánchez, secretario general de este partido, así como algunos líderes municipales de Iguala y Tepecoacuilco y de este municipio.

En la calle de Reforma, en el número 22, se encuentra la casa en la que fueron asesinados a puñaladas Ignacio Benítez Abúndez y su esposa Macedonia Marbán Castrejón. La puerta que da a la calle es de barrotes, color amarillo, por la que perfectamente se puede ver a quienes se encuentran fuera de la casa.

Desde esta puerta que da al patio, hay 20 metros hacia adentro, para llegara a la puerta de la sala principal de la casa.

La casa contigua, de adobe, se encuentra vacía, comentaron los vecinos.

Ignacio Benítez Abundez y su esposa fueron asesinados de 18 y 24 puñaladas respectivamente. La primera versión de la Procuraduría de Justicia sobre el móvil es el robo; sin embargo la esposa aún tenía su anillo en la mano el día en que le practicaron la autopsia de ley.

Según la versión de Karla Ariadna Benítez Marbán, el domingo 3 de agosto, como a las 6 de la mañana, cuatro individuos tocaron la puerta (no se sabe si la de afuera que es de barrotes o la de adentro) y que cuando su papá abrió, se metieron a la casa diciéndole que era un asalto.

Dijo que a ella la maniataron de pies y manos y la metieron en su habitación. Después, como pudo se desató y fue a ver a sus padres que estaban heridos.

Señaló que las últimas palabras de su padre fueron “esto se va a poner peor”.

Ignacio Benítez Abundez era comerciante. Tenía dos locales en el mercado municipal en donde vendía ropa. Era una persona tranquila, no tomaba y no se metía con nadie, comentaron algunos vecinos.

Su esposa era maestra jubilada. Había trabajado en la escuela primaria Tierra y Libertad que se encuentra a dos calles de la casa en la que los asesinaron.

Benítez Abúndez tenía dos casas en Huitzuco y se dice que tiene una propiedad en Iguala, además de un terreno de siembra.

Recientemente, el miércoles, lo habían nombrado candidato del PAN a alcalde de Huitzuco. Su militancia panista era apenas de 10 meses. Se afilió al PAN en noviembre de 2001.

Para algunos, el crimen es político ya que contaba con mucha simpatía con gente de otros partidos. Incluso con priístas que están inconformes por las imposiciones que se dan de parte del ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer y del senador Héctor Vicario Castrejón.

En el cortejo se encontraban algunos ex presidentes municipales como Miguel Noverón y Atenodoro Robles, con quienes, dicen, tenía buenas relaciones.

Se había anunciado que a las 4 de la tarde sería la misa y después el sepelio, pero hasta las 5 de la tarde el cortejo partió rumbo a la iglesia para posteriormente encaminarse al panteón municipal.

Los familiares no quisieron hacer algún comentario respecto al crimen; sólo pedían que no se les molestara y que la información la tendrían que dar las autoridades que investigan el caso.

A las 5 de la tarde llegó el presidente estatal del PAN, Francisco Rodríguez Otero, acompañado de varios panistas, como Jesús María Flores Botello, ex delegado de la Secretaría de Desarrollo Social en Guerrero durante algunos meses.

Una banda de música de chile frito acompañaba el cortejo. Primero tocó Las Golondrinas al salir de su domicilio, y durante el recorrido tocó piezas más alegres, como El Huizache.

Adelante iban dos de sus hijos. Karla Ariadna, inconsolable, caminaba sostenida por su hermano.

Tenía dos hijos en Estados Unidos, en donde Ignacio trabajó durante diez años, para regresar a Huitzuco y poner su negocio, antes de ser candidato.

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